La encrucijada de Lautaro

En aquel cambio de rumbo de Martínez, como suelen motivar tales giros de guion, los sentimientos tuvieron un rol esencial. Dos leyendas argentinas de los lombardos como Javier Zanetti (hoy vicepresidente de la entidad, en aquel entonces ya directivo) y Diego Milito (héroe, además, del propio Racing Club) persuadieron al joven futbolista. Pagó el Inter 25 millones de euros, el doble de lo que iba a abonar el equipo español, para oficializar el traspaso: con 21 años y un potencial asombroso, Lautaro asumía la punta de ataque de un gigante que deseaba acabar con el dominio tiránico de la Juventus en Italia.

La otrora promesa sudamericana, hoy realidad, convenció deprisa al viejo San Siro. El polivalente delantero fue crucial en el primer Scudetto interista en más de 10 años (en 2021, a las órdenes de Conte), participó en la victoria en la final de la Coppa de la temporada siguiente ante el equipo de la Fiat y fue clave en ese mismo escenario el curso pasado, anotando un doblete frente a la Fiorentina en el Olímpico de Roma. Además, junto a hombres como Barella o Calhanoglu, Martínez brillo en la última edición de la Liga de Campeones, donde únicamente el Manchester City les pudo apear del título.

Cierto es que su periodo milanés comenzó con intermitencia bajo las órdenes de Luciano Spalleti, pero tanto con Conte como con el actual técnico interista, Simone Inzaghi, la relevancia de Lautaro fue capital. En el esquema que suele utilizar el Inter en los últimos años (3-5-2), el campeón del mundo parte desde la segunda punta acompañando a un nueve referencia (antes Lukaku, después Dzeko, ahora Marcus Thuram, un ariete algo más móvil que sus antecesores). Se mueve a sus anchas Lautaro; cae a banda y explota los espacios al contragolpe haciendo gala de su velocidad y su habilidad para el desmarque; es feliz bajando a la mediapunta, donde aprovecha su creatividad para dar el último pase y su pericia en el disparo de media distancia; y, por encima de todo, es especialmente bueno en el área: intuitivo e innatamente colocado en la zona de los goles, hace de la definición un arte.

Los números además, aderezan sus innegables cualidades. Por ejemplo, pese a apenas estar en febrero, suma su tercera campaña consecutiva superando la veintena en la Serie A (actualmente acumula 20, tras anotar en la última victoria interista en San Siro, 4-0 ante la Salernitana, el pasado viernes en San Siro). Al son de un Inter temible que lidera el Calcio con siete puntos de ventaja sobre la Juve, Lautaro vive su mejor temporada como profesional.

Tiene ante sí el Atlético un desafío realmente complejo ante los transalpinos en esta primera ronda eliminatoria de la máxima competición europea. Los de Inzaghi, en una versión implementada al Inter finalista de Champions, son un equipo equilibrado que, aparte de conceder muy poco en fase defensiva, trata con mimo la pelota. El momento futbolístico de jugadores como Calhanoglu, Dimarco o Pavard es superlativo; ese nivel, por tanto, también se traduce buenos resultados: son ocho los triunfos consecutivos interistas. Los rojiblancos, por su parte, viajan a Milán tras la balsámica victoria ante Las Palmas. Un soplo necesario de confianza antes de afrontar esta noche en San Siro un reto mayúsculo.