Ana Peláez, la otra historia del Aramco de Sotogrande

La malagueña ha aprovechado un momento de forma de ensueño para dar el salto de categoría y no ha podido elegir un mejor escenario para hacerlo: el campo de La Reserva . "Después de lo bien que he estado jugando este año y de todos los hitos que he conseguido sentía que ya estaba preparada para ser profesional", comentó orgullosa a ABC , sabedora de lo que le esperaba a partir de ahora en su nueva vida. "He acabado muy bien en la universidad de Carolina del Sur , he podido jugar en Augusta , en el Open de Estados Unidos , la Palmer Cup y ahora se me presentaban unas oprtunidades únicas en el Circuito Europeo con este Aramco y el Open de España en noviembre; realmente era mi momento".

Teniendo en cuenta que el año pasado ya se midió a las mayores y rindió a un altísimo nivel ( fue tercera en el Open de España, segunda en el Campeonato de España de Valencia y ganó el Santander Tour de Madrid ), no tenía sentido prologar su carrera amateur más de lo necesario, después de los éxitos logrados ( campeona de Europa y del Annika Invitational ) y de la perspectiva que se le presenta por delante. "Por decir algo, creo que tengo que mejorar en los tiros cortos a bandera, pero mentalmente -que es la parte más importante del golf- me veo muy bien". Tanto es así que sigue la estela de Jon Rahm en cuanto a autoconfianza. "Sé que su objetivo cuando se pasó a pro era ganar 19 nueve grandes y alcanzar el número uno del mundo . Podía parecer un sueño, pero con trabajo poco a poco los ideales se cumplen, y yo estoy muy de acuerdo con esa forma de pensar". De hecho, hay que ver cómo vienen los jóvenes de convencidos hoy en día, pues prosigue diciendo que "lo primero que le pregunté a mi representante era el puesto que ocupaba en el ranking mundial antes de esta semana y me dijo que el 501 . Entonces le contesté que solo tenía que subir quinientos para ser la mejor del planeta ; puede parecer una locura, pero así es como veo las cosas para seguir mejorando día a día".

Desde luego, con esa mentalidad ya tiene mucho ganado, sobre todo porque tiene una cita marcada en el calendario a dos años vista: la Solheim Cup 2023 que se celebrará en el vecino campo de La Reserva y donde aspira a formar parte del combinado europeo. "Por supuesto que quiero estar allí esa una de mis ambiciones", recalca, aunque primero desberá ver cómo concluye esta temporada, pues a día de hoy no tiene ninguna tarjeta y deberá ganársela a pulso en las escuelas. "De momento disputaré el Circuito Nacional y la escuela del LPGA ; a partir de ahí iremos viendo, pues también está la opición de la Europea de La Manga si no se me dan bien las cosas en la americana". Y todo ello con el entusiasmo y la alegría de la niña que con 15 años se fue a vivir a Madrid a compartir la experiencia de la Residencia Blume con las mejores jovencitas de su generación. "Gracias a la ayuda de la Federación Española me he podido formar como jugadora y aprender casi todo lo que sé; les estoy muy agradecida y espero que esa ilusión que tenía entonces me pueda acompañar durante toda mi carrera ".