Cuatro partidos de sanción para Tom Brady por el escándalo de los balones deshinchados

Todo ocurrió cuando los Patriots vencieron por un aplastante 45-7 a los Colts de Indianápolis el pasado 18 de enero. Al concluir el partido, los Colts se quejaron de que los balones con los que se había jugado el encuentro estaban desinchados.

Los balones en cuestión fueron intercambiados durante el primer tiempo, cuando los Patriots ya ganaban de forma clara. New England, ya con los balones nuevo, terminó arrollando a Indianápolis por 28-0 en la segunda mitad. Y todo, dos semanas antes de vencer a los Seattle Seahawks por 28-24 en el Super Bowl XLIX.

Tampoco los Patriots se marchan de rositas tras la investigación de la NFL. El equipo perderá su selección de primera ronda del 2016 y su selección de cuarta ronda del 2017. Además, ha sido multado con un millón de dólares. y será multado un millón de dólares.

La NFL encargó una investigación del caso al abogado Ted Wells, quien ya reveló la pasada semana sus conclusiones, concluyendo con la frase que era «más probable que improbable», que los balones hubieran sido deshinchados a propósito por debajo de los niveles requeridos por la Liga a fin de lograr una ventaja competitiva.

El vicepresidente ejecutivo de la NFL, Troy Vincent, en una carta enviada a Tom Brady y dada a conocer parcialmente por la Liga en el comunicado de la sanción, le explicaba al quaterbacks las conclusiones de la investigación: «Con respecto a tu rol en particular, el informe estableció que existe evidencia sustancial y creíble para concluir que, al menos, estuviste generalmente al tanto de las acciones de los empleados de los Patriots para deshinchar los balones, y que era improbable que sus acciones ocurrieran sin tu conocimiento». Para colmo, el informe acusa de Brady de no haber colaborado en la investigación.