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ABC Cultural

HISTORIAS ANTICLIMÁTICAS

Azúcar Moreno

Los alumnos de su clase lo acosaban arrojándole monodosis de sacarosa y sus profesores soltaban una risita benevolente cada vez que pasaban lista

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Karina Sainz Borgo

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Lo llamaron Azúcar porque su madre rompió fuentes en la sección de repostería de un hipermercado. Siendo Moreno el apellido paterno, su onomástico invitaba a chuparse los dedos. Hasta que cumplió la edad escolar, sobrellevó su nombre con dignidad. Cuando sus padres llamaban su ... atención en un restaurante —¡Azúcar! ¡Azúcar!— los camareros acudían solícitos con varios sobres. Pero el tiempo pasó y no necesariamente a su favor. Lejos de endulzar su vida, el nombre le trajo algunos disgustos. «Azúcar Moreno, diríjase a la oficina del director». «Azúcar Moreno, a la pizarra». Los alumnos de su clase lo acosaban arrojándole monodosis de sacarosa y sus profesores soltaban una risita benevolente cada vez que pasaban lista.

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