El asteroide 2024 YR4 y otros eventos con un 3% de probabilidad: ¿es realmente un riesgo bajo?

Pero, ¿qué significa realmente un 3% de probabilidad? Para ponerlo en perspectiva, hay muchas otras situaciones cotidianas o eventos extraordinarios que comparten un riesgo similar.

La exclusividad de las universidades de élite como Harvard o Stanford se refleja en su tasa de aceptación, que ronda entre el 3% y el 4%. Esto significa que, de cada 100 estudiantes que presentan su solicitud, solo tres logran ser admitidos. Aunque es un número bajo, sigue siendo alcanzable para aquellos con una preparación académica excepcional.

Un ejemplo matemático que ilustra esta probabilidad es el lanzamiento de dos dados de seis caras. La posibilidad de que ambos muestren un seis al mismo tiempo es de 2,78%, un porcentaje muy cercano al 3%. Este tipo de eventos, aunque poco frecuentes, no son imposibles y pueden ocurrir con relativa regularidad en juegos de azar.

En el fútbol profesional, marcar tres goles en un mismo partido, conocido como un 'hat-trick', es un logro reservado para los mejores delanteros. La probabilidad de que esto suceda varía según el jugador y el nivel de la competición, pero en ligas europeas de primer nivel, como LaLiga o la Premier League, se estima entre el 3% y el 5%.

Desde el punto de vista médico, la posibilidad de que un embarazo natural resulte en gemelos fraternos oscila entre el 1% y el 3%, dependiendo de factores como la genética y la edad de la madre. A pesar de ser un fenómeno menos común que los embarazos únicos, la tasa sigue siendo significativa en ciertos grupos de población.

Por otro lado, la prevalencia de personas zurdas en el mundo es de aproximadamente un 10%, aunque algunos estudios han señalado que, en determinadas poblaciones y grupos étnicos, la proporción puede ser tan baja como el 3%. Este dato demuestra cómo la distribución de ciertas características humanas puede variar según el entorno y la genética.

En términos generales, un 3% de probabilidad puede interpretarse de distintas maneras. En una lotería, es un número esperanzador; en una catástrofe, es una señal de alarma. Por ello, aunque el impacto del asteroide 2024 YR4 sigue siendo improbable, los científicos no lo descartan y continúan evaluando su trayectoria con precisión.

En los próximos meses, nuevos cálculos y observaciones determinarán si la Tierra debe prepararse para un posible impacto o si, como en la mayoría de los casos, el asteroide pasará de largo sin consecuencias.