Suscribete a
ABC Premium

La víbora devorada (desde dentro) por su propia cena

¿Quién se come a quién? Un gigantesco ciempiés tragado vivo por el ofidio intenta salir a mordiscos por la cola

La víbora devorada (desde dentro) por su propia cena ecologica montenegrina

j. de j.

Las serpientes devoran a sus presas vivas y enteras, de un bocado, sin masticar. Pero estos modales en la mesa pueden resultar muy peligrosos si la cena se pone rebelde. Un grupo de herpetólogos serbios descubrió en la isla de Golem Grad (curiosamente, conocida ... como Isla de la serpiente) en el lago Prespa, Macedonia, una joven víbora cornuda hembra (Vipera ammodytes) con la cabeza de una escolopendra (Scolopendra cingulata) asomada por la parte inferior del abdomen. Por lo visto, el apetitoso bocado decidió encontrar un camino de salida y se desplazó a mordiscos por el interior del cuerpo del ofidio hasta ver la luz cerca de la cola. Ni el depredador ni la presa sobrevivieron al fatal encuentro gastronómico.

Artículo solo para suscriptores

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comparte esta noticia por correo electrónico
Reporta un error en esta noticia