Google Art Project: «Mapperar» el museo

La iniciativa da el salto en febrero de 2011 , cuando de forma oficial nace Google Art Project , un site en internet desde el que diecisiete grandes centros de arte internacionales (dos de ellos españoles, el Museo del Prado y el Thyssen ) mostraban hasta 1.000 obras de sus fondos que los usuarios de la red podían visitar y con las que interactuar y hasta coleccionar de forma virtual. «Pese a que esta ha sido una fase tímida del proyecto, ha generado veinte millones de visitas en poco más de un año y 180.000 colecciones creadas por los usuarios», explica Robles. Ahora se da un importante salto cuantitativo –que fue presentado en París, la nostálgica ciudad del arte y la cultura, la semana pasada, y en Madrid esta–, pues de los 17 museos y centros de arte pioneros –fundamentalmente de EE.UU. y Europa– se pasa a 150, de los cinco continentes (curiosamente, la Tate y el MoMA no estaban aún en la lista) y de esas mil obras mencionadas (básicamente pinturas) a las 30.000 actuales , entre las que ya se contempla la escultura, la fotografía y hasta el arte callejero .

La respuesta por parte de los museos ha sido muy positiva. «Nadie ha visto nunca Google Art Project como algo que canibalice las visitas a los espacios artísticos, sino al revés. El site provoca más visitas. El espectador quiere luego ver las obras en directo, porque la experiencia digital no sustituye a la presencial , ni al revés». Para el responsable de la compañía, forma parte de la filosofía de Google hacer de la información algo disponible y útil para todo el mundo, «también la artística», puntualiza. Por otro lado, su empresa recalca su compromiso por el arte y la cultura (no en vano, en la actualidad, Google produce imágenes en alta resolución de los Manuscritos del Mar Muerto , digitaliza los archivos fotográficos personales de algunos protagonistas de la Historia reciente, como Nelson Mandela , y trabaja en la creación de modelos 3-D de algunas ciudades históricas, como las francesas del siglo XVII).

Para los agentes implicados es, sobre todo, una posibilidad de darse a conocer mejor , de profundizar en sus colecciones. Una de las nuevas posibilidades de la aplicación es la de realizar visitas virtuales por sus salas para conocer el emplazamiento exacto de las obras que albergan. De ellas disfrutan ahora los dos museos españoles que ya formaban parte del proyecto, que amplían así su participación en el mismo. Entre los recién llegados, el MNAC , el Museo de Bellas Artes de Bilbao , el Art Nouveau y Art Decó Casa Lis de Salamanca, el IVAM y la Fundación Banco Santander. Para Borja Baselga , director de esta última, Art Project es una herramienta muy poderosa y una fórmula inmejorable para fomentar el arte , el coleccionismo y para crear nuevos discursos artísticos.

El IVAM es uno de los centros pioneros en el uso de Internet (ahí cuelgan sus catálogos y participan de las redes sociales). Consuelo Císcar, su responsable, cree que el site «abre una nueva brecha tecnológica ». Porque, como puntualiza Pepe Serra, director del MNAC, «es fundamental cualquier vía que nos permita acercar el arte al público. No podemos esperar tan solo que sea el público quien se traslade a los museos ». Javier Villar, desde el de Bellas Artes de Bilbao, resalta el uso de esta herramienta para aproximar el arte a un público joven muy familiarizado con el uso de las nuevas tecnologías. Pedro Pérez Castro, director de la Casa Lis , subraya «el valor añadido» que Art Project añade a las colecciones: «Ahora es posible comunicar y difundir elementos de cada obra de arte de forma individualizada que, de otro modo, no se podría contemplar».

Google se ha servido de la documentación digitalizada por los propios museos para conseguir que su catálogo alcance las 30.000 entradas. Pero aporta su propio valor añadido. Lo más destacado, un apartado especial con una selección de 46 obras maestras (de El Nacimiento de Venus , de Botticelli, a La noche estrellada , de Van Gogh; un fragmento del friso del Partenón de Fidias o La ronda nocturna , de Rembrandt) digitalizadas con una resolución de dos gigapíxeles (la misma empleada para las primeras obras de El Prado del proyecto), que «permiten apreciar detalles ocultos para el ojo humano , incluso ante la obra en el museo», incide Robles. De otro lado, las visitas virtuales a 385 salas de 46 museos de todo el mundo con la tecnología empleada en la aplicación Street View y que genera panorámicas de 360 grados : «Hemos tenido que reducir la máquina empleada para poder transportarla a mano y transitar por espacios cerrados, pero los resultados son igual de espectaculares».

¿Y hacia dónde se dirige la iniciativa? Pues no se trata tan solo de crecer cuantitativamente: «Este es un proyecto vivo que ha pasado por dos revisiones en menos de dos años. Es difícil predecir su futuro, pero este lo marcarán el uso que hagan de él los usuarios, sus necesidades, y de cómo avancen las tecnologías . Queremos ampliar el número de museos participantes. Pensemos que solo contamos con siete españoles , un país con un patrimonio vastísimo. También queremos que los que ya están vayan volcando más fondos. Y luego hay que logar que el espacio sea más funcional , que la integración social sea mayor, que se pueda obtener más información, que sea más navegable ... Y las tecnologías facilitarán que no todo sea pintura. En ello tendrá mucho que decir el 3-D », remata Robles.