Las diferencias sobre el refuerzo del PNUMA marcan un arduo camino hacia Río+20

La XII Reunión Especial del Consejo de Administración del PNUMA y del Foro Global de Ministros de Medio Ambiente, celebrada en Nairobi (Kenia) hasta ayer, se saldó con un acuerdo «in extremis», merced al «espíritu constructivo» de la UE, EE.UU. y el G-77 (grupo de países emergentes y en desarrollo), confirmaron fuentes cercanas a la delegación española.

El documento consensuado tiene dos puntos fuertes: 1) fortalecer el PNUMA como «autoridad medioambiental global» y 2) reforzar las medidas contra la degradación medioambiental .

Así lo decidieron ayer los representantes de 140 países -entre ellos, unos ochenta ministros- gracias a la mediación de España , que ejerce la presidencia del Consejo de Administración del citado organismo.

Unos cien países, incluidos los miembros de la UE y la Unión Africana (UA), apoyan el plan promovido por la UE para convertir el PNUMA en una agencia de la ONU con mayor poder de decisión.

El PNUMA carece de capacidad ejecutiva y de presupuesto independiente en la actualidad. Y sus decisiones se elevan a la Asamblea General de las Naciones Unidas, que puede aprobarlas o rechazarlas.

La ministra brasileña de Medio Ambiente, Izabella Teixeira, afirmó que su país, anfitrión de Río+20, no comparte la propuesta comunitaria, ya que el proceso negociador «contempla otras».

«Apoyamos el fortalecimiento del PNUMA (...). Sin embargo, en este momento no queremos que se convierta en una agencia especializada», declaró la jefa de la delegación estadounidense, Kerri-Ann Jones.