De la Vega: «Cuando se pertenece a un Gobierno siempre se tiene la maleta hecha»
La todavía vicepresidenta primera agradece emocionada a Zapatero su confianza «para compartir con él estos años de ilusión en un proyecto que siempre ha merecido la pena»
I. ZAMORA
María Teresa Fernández de la Vega ha ofrecido hoy su última comparecencia como vicepresidenta primera del Gobierno antes de entregar el testigo a quien esta tarde se convertirá en la nueva mano derecha de Zapatero, Alfredo Pérez Rubalcaba.
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En una emocionada, pero escueta intervención, De ... la Vega ha expresado su «profundo agradecimiento» a Su Majestad el Rey y a toda la Familia Real para, posteriormente, agradecer al que ha sido su jefe y cómplice durante los seis años en que la vicepresidenta ha sido su número dos. «Gracias por permitirme compartir con él estos años de trabajo e ilusión en un proyecto que siempre ha merecido la pena, hasta en los momentos más duros» . Del mismo modo, De la Vega ha recordado que si ha sido la primera mujer en presidir un Consejo de Ministros «ha sido mérito del Presidente, que así lo quiso, y también del esfuerzo y la lucha de tantas mujeres que durante tanto tiempo han ido abriendo el camino».
«Siempre estamos en disposición de salir del Gobierno porque aceptamos las reglas»
En un discurso en el que la vicepresidenta ha evitado entrar en detalles acerca de su futuro más próximo como miembro del Consejo de Estado, así como valorar la confianza puesta por Zapatero en Rubalcaba, De la Vega solo se ha limitado a agradecer su trabajo a sus compañeros, «porque con ellos he compartido dedicación, compromiso, esfuerzo, ilusión y de todos he aprendido muchísimo»; a los ciudadanos, «porque tanto su afecto como su crítica me han ayudado a hacer mejor mi trabajo» y a los medios de comunicación «por hacer posible que la voz del Gobierno haya llegado a los ciudadanos».
Seguir las reglas del juego
De la Vega ha destacado también que «cuando se pertenece a un gobierno democrático siempre se tiene la maleta hecha», y ha asegurado que a cordó su salida del Gobierno el pasado domingo con Zapatero y por tanto «no ha habido sorpresa, ya que los miembros del Gobierno siempre estamos en disposición de poder dejarlo, pertenece a las reglas del juego y lo aceptamos con gusto». Para terminar, ha recordado que «quiero que los ciudadanos sepan que han sido mi guía y continuarán siéndolo, ese es el único principio de cualquier servidor público».
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