La mujer hallada muerta en Castrogonzalo (Zamora) tenía golpes «violentos» en la cara y el cráneo

La Guardia Civil de Zamora investiga el suceso y trata ahora de dar con el autor del homicidio sin que por el momento se pueda orientar ni descartar ningún tipo de móvil del crimen, según ha precisado en declaraciones a los periodistas el subdelegado del Gobierno en Zamora, Jerónimo García Bermejo. Aunque los agentes ya están interrogando a un vecino del pueblo por su posible vinculación con la muerte de la joven.

El cadáver de la mujer, Leticia Rosino Andrés, de 33 años, ha sido trasladado ya al Instituto Anatómico Forense de Zamora, donde se le practicará la autopsia y se tratará de determinar cuestiones que aún no han podido precisarse, como si existió algún tipo de violencia sexual hacia la víctima.

La denuncia por la desaparición la interpuso una hermana de la joven sobre las seis de la tarde de este pasado jueves, tras no localizarla, y desde el primer momento se consideró una desaparición de alto riesgo por las circunstancias en las que se había producido, al ser la fallecida una persona que realizaba una vida normal.

En las labores de búsqueda por los alrededores del pueblo, por donde la mujer salía a pasear cada tarde, participaron unos setenta vecinos del municipio junto a la Guardia Civil y perros del grupo cinológico del instituto armado.

El cadáver fue localizado sobre las 1.15 horas de esta madrugada en el extrarradio de Castrogonzalo, en un terraplén próximo al río Esla cerca de la planta de transferencia de residuos sólidos urbanos del municipio.

El cuerpo sin vida de la joven presentaba « evidentes signos de violencia », según el subdelegado del Gobierno.

Hasta el lugar se desplazó una comisión del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Benavente, que sobre las 4.35 horas ordenó el levantamiento del cadáver para su traslado al Instituto Anatómico Forense de Zamora.

La zona en la que fue encontrado el cuerpo permanece esta mañana acordonada y en ella ha trabajado la policía judicial de la Guardia Civil para intentar encontrar pistas que permitan esclarecer el suceso.

La investigación judicial está bajo secreto de sumario y por el momento la Subdelegación del Gobierno en Zamora no ha podido precisar si la muerte se produjo en el lugar en el que fue encontrado el cuerpo o fue dejado allí posteriormente.

La denuncia por la desaparición la interpuso la hermana de la víctima tras intentar sin éxito contactar con la víctima después de que hubiera salido a dar un paseo como tenía por costumbre hacer cada día a primera hora de la tarde.

Leticia Rosino, natural de un pueblo de la comarca zamorana de Tábara, era química de profesión y trabajaba en una industria láctea de Castrogonzalo, donde vivía junto a su novio.

El suceso ha causado gran conmoción en este municipio del norte de la provincia de Zamora de unos quinientos habitantes situado a diez kilómetros de Benavente en el que se decretarán tres días de luto oficial y las banderas ondearán a media asta por el fallecimiento de la joven.