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AMENAZA YIHADISTA

«Stop radicalismos», un plan para desmontar las mentiras del Daesh

La iniciativa impulsada por el Gobierno y dieversas entidades incluye también la puesta en marcha de canales para que los ciudadanos comuniquen si alguien de su entorno se está radicalizando

Escena propagandística del Daesh ABC

P. MUÑOZ / J. PAGOLA

«Stop radicalismos» es un instrumento con el que el Gobierno pretende generar contenidos de contranarrativa para hacer frente a la potente propaganda de los grupos yihadistas y frenar de esta manera la capacidad de reclutar del Daesh sobre todo. La iniciativa, apoyada por diferentes entidades y colectivos, ofrece también los cauces para que quien detecte la presencia en su entorno de alguien con indicios de estar en un proceso de radicalización lo comunique a las autoridades para evitar que se convierta en terrorista.

Todos los expertos coinciden en que en esta dura guerra contra el terrorismo yihadista, la batalla más difícil es la dirigida a destruir el «cibercalifato», porque en el caso de que el Daesh sea liquidado físicamente, la potente capacidad propagandística que ha generado será utilizada por Al Qaida u otros grupos emergentes . Consciente de ello, el Ejecutivo activará a partir de la próxima semana, y dentro de su Plan contra la Radicalización Violenta aprobada en enero, una serie de medidas para combatir en su propio terreno, internet, en las redes sociales, al Daesh virtual.

Entre las iniciativas, se pretende difundir, por ejemplo, el relato de personas que se desplazaron a Siria e Irak para combatir, y regresaron horrorizados por lo visto allí .También las experiencia de personas que tienen un hijo, o más, o algún otro familiar luchando en zonas en conflicto. «Se trata de generar contenidos de contranarrativa para compensar esa capacidad propagandística de los yihadistas. Hay que poner al descubierto todas sus mentiras», comentan expertos antiterroristas. Pero la iniciativa resultaría insuficiente si no se hubiera contado con la participación de entiddes y determinados colectivos, por ejemplo, la comunidad islámica en España. En concreto, en la elaboración del Plan, coordinado por el Centro de Investigación contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (CITCO), han participado doce ministerios.

Experiencia de otros países

La iniciativa se inspira en la contranarrativa que ya están difundiendo países como Estados Unidos, Francia, Reino Unido o Alemania, pero se incorporarán elementos propios de España. Una de las cuentas que difunde estos contenidos se llama Think Again Turn Away (piénsalo bien aléjate) y usa etiquetas como #WhyTheyLeftDaesh (por qué dejan Daesh). En Francia, el Gobierno galo también practica esta estrategia, llegando a mostrar a personas que relatan como algún familiar experimentó un proceso de radicalización yihadista. En Reino Unido, cuentas como @UKAgainstISIL también confeccionan este tipo de contenidos. Muchos de estos mensajes se elaboran en árabe.

Por ejemplo, en la contranarrativa emprendida desde Emiratos Árabes se lanzan mensajes como « La mafia del Daesh secuestra, roba y soborna a los dueños de negocios para financiar su terrorismo», acompañados de viñetas ilustrativas. En la de Estados Unidos: «Daesh no defiende a los musulmanes, sino que provoca el desplazamiento y mata a musulmanes por poder y dinero». En la campaña de Francia se difunde el testimonio de la madre de un combatiente extranjero...

Para intentar poner freno a esta realidad, el Gobierno comenzará a emitir sus primeros contenidos en las cuentas oficiales en Twitter de la Policía (casi dos millones de seguidores), la Guardia Civil (casi medio millón de seguidores) y el Ministerio del Interior (más de 220.000 seguidores).

Canales de colaboración ciudadana

Además, a partir de la próxima semana se activará la página web www.stop-radicalismos.es en la que los ciudadanos podrán comunicar, de forma anónima, si en su entorno han detectado casos de personas que se están radicalizando o individuos que han desaparecido sin causa conocida . En la web se facilitará un formulario que se podrá rellenar en español o en árabe y que irá dirigido directamente al Citco. «No se trata de un sistema para presentar denuncias ante los tribunales», advierten en el Ministerio del Interior. Se trata de detectar posibles casos de radicalización en una fase más inicial. Si el proceso avanza, y lo quiere esta persona, se podría presentar ya la correspondiente denuncia y declarar como testigo. Siempre de forma voluntaria .

También se pondrá a dispopición de los ciudadanos otro canal de comunicación mediante l a aplicación para móviles «Alertcops» donde ya se puede aportar información sobre robos, agresiones, peleas o casos de violencia de género. Además, se habilitará el teléfono 900 822 066 con el mismo objetivo.

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