Arias Cañete ocupará su escaño en el Congreso con el Grupo Popular hasta julio

Cañete, que no había acudido a su escaño desde que dejó de ser ministro de Agricultura hace unas semanas, ha vuelto este miércoles al hemiciclo y ha ocupado por primera vez su nuevo asiento en el Salón de Plenos.

Tras dos años y medio en el banco azul, el eurodiputado electo se ha sentado en el asiento que ha reservado para él la dirección del Grupo Popular y que se sitúa en la primera fila de escaños, justo detrás del banco azul reservado al Gobierno.

Así, el exministro comparte fila con la cúpula de su grupo parlamentario. En concreto, mientras siga en la Carrera de San Jerónimo tendrá a su derecha a Jorge Moragas, jefe de gabinete del presidente del Gobierno, y estará a dos escaños del secretario de Estado de Relaciones con las Cortes, José Luis Ayllón.

También ha regresado al hemiciclo este miércoles la cabeza de cartel del PP a las europeas, Elena Valenciano, quien ha ocupado su sitio habitual, justo detrás del escaño del todavía secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, ausente en este Pleno de control del Congreso como el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy.

La presencia de Rajoy en Bruselas, donde ha analizado con los demás líderes europeos el resultado de las elecciones del domingo, ha impedido que tuviera lugar el tradicional rifirrafe entre el jefe del Gobierno y el líder de la oposición. Precisamente sobre ello, a Cañete le han preguntado los informadores del Congreso para saber sus opciones de ser comisario europeo y Arias Cañete ha remitido al jefe del Ejecutivo: "No sé, pregúntele usted al señor Rajoy". Rajoy participó ayer martes por la noche en una cena con los líderes de la UE en la que analizaron los resultados de los comicios europeos y repasaron la situación en Ucrania, después de las elecciones presidenciales celebradas el domingo.

Los veintiocho jefes de Estado y de Gobierno discutieron por primera vez las prioridades de la futura Comisión Europea (CE) y los posibles candidatos a presidir esta institución, aunque no se espera que por ahora se consensúe ningún nombre, explicaron fuentes comunitarias.

Como es habitual cuando no acuden a la Cámara los jefes de filas de los dos grandes partidos, también han faltado a la sesión de control un gran número de diputados. En esta ocasión han faltado unos 50 del PP y en torno a 25 del PSOE. También hubo un escaso seguimiento en el hemiciclo de los debates que tuvieron lugar en la sesión plenaria del martes.