Sáenz de Santamaría se felicita por la convergencia de intereses con Francia

El viaje de día y medio de duración de la Vicepresidenta, ministra de Preisidencia y portavoz del Gobierno, ha tenido dimensiones empresariales, culturales y diplomáticas.

Soraya Sáenz de Santamaría visitó la tarde del lunes el centro de diseño de Renault, en el marco del diálogo con la gran empresa francesa, con importante presencia en España.

La mañana de este martes, la Vicepresidenta inauguró la exposición «El Renacimiento y el sueño», donde obras de arte del Bosco, Veronese y el Greco, propiedad española, ocupan un puesto importante.

Tras esa inauguración, Soraya Sáenz de Santamaría sostuvo una comida de trabajo altamente diplomática con Jean-Marc Ayrault, que la resumió de este modo: « He podido comprobar el alto grado de complicidad que existe entre Francia y España , no solo en el terreno bilateral si no en la escena europea. Hemos concertado muchos puntos de vistas en terrenos sensibles como la lucha contra el terrorismo, la economía numérica, la creación de empleo o los problemas de la inmigración, a escala europea».

La Vicepresidenta española y el Primer ministro español han preparado el trabajo y posibles posiciones comunes de Francia y España, ante las próximas cumbres bilateral y europea, que tratará de temas candentes, como la tragedia de Lampesuda.

Soraya Sáenz de Santamaría se felicitó, igualmente, de la comprensión y puntos de vista comunes que los gobierno de Mariano Rajoy y François Hollande sostienen en bastantes terrenos capitales para España y Francia.

La primera pregunta que se hizo al Jefe de Gobierno francés, durante la breve rueda de prensa que siguió a la comida de trabajo, fue esta: «El presidente Hollande ha anunciado una Ley que regulará en Francia el derecho a la convocatoria de un referéndum de iniciativa popular. ¿Contemplará esa Ley la posibilidad de que una región francesa, como Córcega, pueda preguntar a sus electores si desean o no desean la independencia y posible secesión?».

Jean-Marc Ayrault respondió con una sola palabra: “No”. Soraya Sáenz de Santaría sonrió y no deseó añadir nada.