Las ventas de vehículos podrían aumentar un 10% sin las ayudas del Plan PIVE

La comercialización de vehículos lleva acumulados 22 meses consecutivos de ventas al alza. Solo entre enero y mayo de este año, han aumentado un 21%, “el mayor crecimiento de Europa”, ha señalado Armero. Por ahora se encuentra disponible el Plan PIVE 8, aunque se da por seguro que será la última edición de ayudas oficiales. Sin embargo, el vicepresidente de Anfac se ha mostrado confiado en que las ventas continúen subiendo “si continúa la recuperación económica, si aumenta la renta disponible por la reforma fiscal, si el euribor sigue bajo y si el petróleo no sube por encima de los 70 dólares por barril”. Además, ha apuntado que ese crecimiento puede quedar “consolidado” en el caso de que “la tributación nos ayude”.

Se ha referido Armero a las demandas de la industria del automóvil en materia de fiscalidad: supresión del Impuesto de Matriculación y “resideño” del Impuesto de Circulación. En el primer caso, “porque se trata de un doble IVA y es un impuesto anacrónico en Europa”, aunque comprende que se trata de un tributo con el que se financian las comunidades autónomas. Con respecto al de Circulación, de ámbito municipal, ha exigido reformarlo “para que se pague por circular con él, y no por el siemple hecho de tenerlo en el garaje”. De hecho, Armero ha anticipado que de cara al futuro “se pagará por el uso de carreteras y ese será el verdadero impuesto de circulación”.

El presidente de Anfac ha defendido al sector frente a las sanciones impuestas por la Comisión Nacional del Mercado y la Competencia (CNMC) por pactar precios a determinados concesionarios. Mario Armero ha reconocido que ésta “no es una buena noticia”, pero también ha defendido “la altísima competencia” que hay entre los vendedores de automóviles, indicando que existen continuas ofertas publicitarias, que el precio medio del vehículo ha caído un 15% durante la crisis y que “hay una enorme guerra comercial”.

Sobre el tratado de libre comercio entre Europa y Estados Unidos, Armero ha valorado positivamente esta iniciativa, porque “puede tener repercusiones positivas para la industria española”, al eliminarse aranceles en el comercio de vehículos con ese país.