Investigan la promesa de aprobados a cambio de ir a protestas estudiantiles

Las manifestaciones, originadas en apariencia de forma espontánea contra los recortes decretados por el Gobierno valenciano, han ido también cayendo en las redes de la instrumentalización política, visualizada en la nutrida presencia en las marchas de diputados y representantes del PSOE y de la coalición de izquierdas Compromís, lo que ha llevado a la delegada del Gobierno, Paula Sánchez de León, a convocar por separado a los partidos para pedirles «responsabilidad» ante la proliferación de protestas no comunicadas previamente a las autoridades.

A este ambiente de crispación se suman ahora las denuncias formuladas por varios padres de alumnos que, investigadas por la Policía y por la propia Inspección de Educación de la Generalitat, apuntan a la «comprensión» mostrada por los docentes con los manifestantes, así como a la disposición de algunos profesores a facilitar a los jóvenes la «conciliación» de sus «ocupaciones» callejeras con su actividad académica.

La Policía ha recibido información basada en testimonios de los propios estudiantes en la línea de que los profesores habrían garantizado el aprobado a quienes tomaran parte en las manifestaciones sin tener en cuenta tampoco las faltas de asistencia que están obligados a computar.

De hecho, y pese a que la dirección del centro se desmarcó ayer de cualquier relación con las protestas, el claustro de profesores del Luis Vives redactó el pasado miércoles una nota oficial «de repulsa» ante «la violentísima y desproporcionada actuación policial» que enmarca «en los intentos reiterados de nuestras autoridades de desprestigiar la enseñanza pública y criminalizarnos a todos los que estamos comprometidos con ella, como profesores, personal no docente, estudiantes, padres y madres». La nota incluye enlaces a los «vídeos de las agresiones» con los que quieren acreditar lo desmedido de la actuación de los agentes.

De los detenidos, dos quedaron ayer en libertad con cargos y ocho pasaron a disposición judicial, tras lo cual fueron puestos también en libertad provisional con comparecencias periódicas. Los seis de ayer lo fueron por desórdenes públicos (volcaron algunos contenedores). Durante la jornada, la Policía estableció un cerco preventivo a los manifestantes e identificó a cada uno de ellos.