Plácido Domingo vuelve al Liceu con «Tamerlano»

La obra se ofrecerá en versión de concierto, mañana y el sábado, y conforma, con sus tres actos, un espectáculo de casi cuatro horas y media de duración, con lo mejor del Händel serio. "Tamerlano" se estrenó en 1724 en Londres y gracias al renacer del repertorio barroco ha interesado a Plácido Domingo, quien ya ha hecho sus pinitos en el género en obras como "Iphigénie en Tauride", de Gluck, que ha cantado en Valencia, Nueva York y Madrid.

En la cena de gala que le ofreció el Círculo del Liceo el pasado sábado, el músico madrileño reconocía la fascinación que le ha despertado este repertorio en las postrimerías de su carrera como cantante: “Es difícil, está lleno de agilidades, pero le va bien a mi voz”, comentó, un punto de llegada después de haber recorrido una de las carreras más longevas y heterodoxas de la historia de la música. Durante el discurso en el que agradecía la Medalla de Oro que le impuso el Círculo, Domingo también afirmó que después de su última aparición en el Liceu en 2008 pensaba que ya no regresaría al escenario de La Rambla: “Los años pasan y cuando canté ‘La Walkyria’ pensé que no volvería a cantar en Barcelona, pero ahora vuelvo con ‘Tamerlano’. Mi ilusión es poder volver una vez más”, apuntó.

Domingo es un recién llegado al Barroco, pero aquí compartirá escenario con auténticos expertos, como los citados contratenores. El croata Max Emanuel Cencic se ha convertido en toda una revelación siendo saludado como “el mejor contratenor del mundo”, título que agradece con serenidad, apuntando que la idea es hacer bien el trabajo: “Donde no llego prefiero abstenerme. Cantar lo que no está al alcance de uno acaba arruinando la voz. He hecho muchos comprimarios y segundos papeles hasta llegar a Rinaldo, Tamerlano o Faramondo. Toda carrera debe desarrollarse gradualmente, y la voz lo agradece”, afirmó a la revista especializada Ópera Actual.

Este «dramma per musica» en tres actos narra la derrota y prisión del sultán otomano Bajazet –papel que defiende Domingo- por parte del guerrero turco-mongol Tamerlano –a cargo de Bejun Mehta, sobrino del célebre director musical Zubin Mehta- en la batalla de Ankara (1402).