El Estado gastará 5.000 millones más pese al recorte presupuestario

De acuerdo con estas cifras, por tanto, el Estado tendrá menos dinero para repartir entre los ministerios y hacer frente a los gastos de la deuda y del desempleo, aunque la vicepresidenta económica, Elena Salgado, rechazó ayer dar ningún dato concreto al respecto pese a que fuentes de Moncloa habían asegurado hace unos días que el tijeretazo podría llegar al 10%.

«El recorte será superior al 3,8% en el caso de los ministerios, pero todavía no sabemos cuánto porque dependerá de la partida que tengamos que destinar a financiar la deuda pública y eso está en función del momento que viva el mercado», argumentó la ministra. Si el presupuesto se cerrara ahora, con la prima de riego en máximos, la cuantía para pagar los intereses de la deuda sería elevada y el dinero a repartir entre el resto de partidas inferior, pero Economía confía en que en septiembre, cuando se aprueben las cuentas, los mercados se hayan relajado.

En total, el Gobierno contará con 117.353 millones, frente a los 122.256 de este año 2011 para todos estos menesteres.

Pero el gasto total del Estado crece un 3,7%, algo más de 5.000 millones de euros, al situarse en 155.635 millones de euros, frente a los 150.000 de este ejercicio, según las cifras aprobadas ayer por el Consejo de Ministros. La razón es que el Gobierno tendrá que transferir a entidades locales y comunidades autónomas 38.282 millones, 10.000 más que este ejercicio, porque el año pasado (2010)se les dieron menos anticipos a cuenta de la recaudación de impuestos de los que finalmente les han correspondido y en 2012 hay que saldar las cuentas.

La vicepresidenta Salgado explicó, en este sentido, que las autonomías recibirán más de 7.000 millones de ingresos extra el próximo año por este concepto y los entes locales 2.300, cantidades que deberían destinar a sufragar servicios básicos y en el caso de los ayuntamientos a reducir la morosidad en el pago de sus facturas, que perjudica especialmente a las pymes.

España tendrá que reducir sus números rojos desde el 6% del PIB en 2011 al 4,4% en 2012 y el ajuste se centrará exclusivamente en el Estado, que tendrá que recortar su déficit 1,6 puntos, mientras el resto de administraciones mantienen sus objetivos. Pero la ministra rechazó que vaya a aprobar una subida de impuestos o un recorte en el sueldo de los funcionarios para hacer frente al ajuste.

Ante estas cifras, el responsable de Economía del PP, Cristóbal Montoro, aseguró que el objetivo no es creíble ya que parte de una previsión de crecimiento económico del 2,3%, muy superior al estimado por los principales organismos.