Jade Goody muere y tendrá todo un funeral de «telerrealidad»
No murió ante las cámaras, como en un primer momento se había mostrado dispuesta a hacer, pero Jade Goody tendrá un funeral propio de «reality show». Goody, de 27 años y famosa en el Reino Unido por sus apariciones en «Gran Hermano», falleció en la ... madrugada de ayer a causa del cáncer que le diagnosticaron el pasado verano. Gordon Brown acogió su muerte diciendo que «todo el país ha admirado la determinación» en su lucha contra el cáncer de útero que padecía, mientras que su relaciones públicas ha anunciado que el funeral será una «Jade Goody Production».
Boda, bautizo y entierro
Absoluto producto de la telerrealidad, que de ser una chica sin ningún mérito pasó a estrella de la televisión, Goody se había retirado los últimos días completamente de las cámaras después de que hace dos semanas, ya bastante debilitada, se bautizara junto con sus dos hijos, Bobby, de cinco años, y Freddy, de cuatro. Quince días antes había vendido la exclusiva de su boda a la revista del corazón «OK!», por la que al parecer recibió unos 780.000 euros. Según aseguró, quiso sacar partido publicitario de su enfermedad para poder dejar dinero a sus hijos.
Su muerte se produjo a las 3.14 de la madrugada del domingo en su casa del condado de Essex. El fallecimiento fue anunciado a los medios por Max Clifford, el más célebre agente mediador en la venta de exclusivas a la prensa británica, que ha actuado de jefe de ceremonias para Goody en los últimos meses. Clifford avanzó que ya ha comenzado los preparativos para el funeral, aún sin fecha.
Según el agente, Goody tuvo tiempo de despedirse de sus hijos. «Se sentó con ellos y les explicó que mamá se iba al cielo y que el cielo es el lugar donde la gente que está enferma va a ponerse mejor. Les dijo que cuando miren el cielo y vean una estrella será mamá que le está mirando», explicó Clifford, utilizando el tono edulcorado que ha servido para transformar la imagen de Goody en este tramo final de su vida. El primer ministro, Gordon Brown, no dudó en sumarse al duelo, a pesar de que la única razón de la notoriedad de Goody había sido su participación en un programa tan denigrado como «Gran Hermano», en el que la joven había demostrado gran ignorancia y modos poco educados. Pero la publicidad que su caso ha dado al cáncer de útero ha venido a redimir la figura de Goody, y Brown no quiso desaprovechar la posibilidad de hablar en la misma onda que la gran masa de la población británica.
El «premier» se manifestó «profundamente entristecido» por la muerte de una «mujer con coraje tanto en la vida como en la muerte». «El país entero ha admirado su determinación a la hora de proveer un futuro brillante a sus hijos. Su familia puede estar extremadamente orgullosa del trabajo que ha hecho para concienciar sobre ese tipo de cáncer, lo que beneficiará a miles de mujeres en todo el Reino Unido», declaró Brown.
La asociación contra el cáncer británica, Cancer Research, ha confirmado que desde que Goody anunció su enfermedad, poco habitual en personas de su edad, muchas mujeres jóvenes han acudido al médico para una revisión. Ha hecho un gran servicio público», aseguró Harpal Kumar, responsable de esa entidad.
Junto a los numerosos ramos de flores que ayer dispusieron a la entrada de su casa, también llegaron multitud de mensajes de condolencia. Entre ellos el de la actriz de Bollywood Shilpa Shetty, que había sufrido comentarios racistas en una de las series de «Gran Hermano» en las que Goody había participado.
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