La mitad de las provincias de España, en riesgo muy alto por el descontrol de la pandemia

Están en rojo las cuatro provincias catalanas, las tres del País Vasco, las tres de Aragón, Madrid, Navarra, Murcia, Cantabria, Baleares, Santa Cruz de Tenerife, Cuenca, Guadalajara, y seis de las nueve de Castilla y León. Tan solo Burgos y Segovia, ahora en riesgo alto, han mejorado su situación respecto a la semana anterior.

Con los contagios todavía en máximos en todo el país, el foco está puesto ahora en la asistencia hospitalaria, impactada por la repercusión de la explosión de casos. La incidencia está en todas las provincias sobradamente por encima del nivel de riesgo, fijado en 500 positivos por cada 100.000 habitantes en los últimos 14 días.

En Guipúzcoa supera los 7.000; es decir, siete de cada cien guipuzcoanos han dado positivo en las últimas dos semanas. Navarra está próxima a esa cota, y Vizcaya y Zaragoza también rebasan los 6.000 de incidencia. En el lado opuesto, las tasas más bajas están en Andalucía, con Sevilla, Málaga, Huelva, Cádiz y Granada con los niveles más bajos, aunque todas por encima del millar.

La asistencia sanitaria es ahora el principal foco de atención en la sexta ola, una vez dada por descontada la elevadísima incidencia, dentro de la estrategia gubernamental de ‘ gripalización ’ de la pandemia. Con la sociedad española mayoritariamente vacunada, con los mayores de 60 años con tercera dosis, el impacto en los hospitales está siendo menor en relación al número de contagios, pero alcanza niveles de saturación en gran parte de España. En todo el país supera ya los niveles de las dos olas anteriores .

En el conjunto de España, la ocupación hospitalaria se acerca al nivel de riesgo alto, fijado en el 15% de las camas ocupadas por pacientes con coronavirus. Una decena de provincias ya han rebasado ese límite, con Vizcaya, Álava y Zaragoza por encima del 20%. En el ritmo de nuevos ingresos hospitalarios, tan solo una provincia, Zaragoza, está en nivel muy alto, con más de 50 nuevas hospitalizaciones por cada 100.000 habitantes en los últimos siete días. Este indicador marca la tendencia de la presión en los hospitales.

La ocupación de las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) en el conjunto de España está también próxima al nivel de riesgo muy alto , fijado en el 25% de camas ocupadas. Un extremo alcanzado ya por una veintena de provincias, con Huesca y Gerona con más de la mitad de sus unidades absorbidas por la pandemia. En el ritmo de nuevos ingresos, que marca la tendencia en la presión de las UCI, la situación está en riesgo muy alto en cinco provincias. Barcelona, Lérida, Murcia, Cantabria y Álava superan la tasa de cuatro nuevos ingresos por cada 100.000 habitantes en los últimos siete días.

El semáforo del Ministerio de Sanidad establece cuatro niveles de alerta, con umbrales numéricos concretos fijados a partir de indicadores clave para el control de la pandemia. No hay, sin embargo, medidas asociadas a cada nivel de alerta.

Los indicadores establecidos por Sanidad son: incidencia acumulada en los últimos 14 días y en los últimos siete días, esto es, número de casos por cada 100.000 habitantes en ese periodo; positividad, es decir, porcentaje de test con resultado positivo; porcentaje de camas de hospital ocupadas con enfermos de Covid y tasa de ingresos; y porcentaje de camas de UCI ocupadas con enfermos de Covid-19 y tasa de ingresos.

En el nivel extremo se encuentran las regiones con una incidencia acumulada a 14 días mayor de 500 casos por cada 100.000 habitantes; una incidencia a siete días mayor de 250 casos por cada 100.000 habitantes; una positividad superior al 15%; una ocupación de camas de hospital con enfermos de Covid por encima del 15% y una tasa de 50 nuevas hospitalizaciones por cada 100.000 habitantes en los últimos siete días; y una ocupación de camas de UCI con enfermos de Covid mayor del 25% y una tasa de 4 nuevos ingresos.

El escenario óptimo de la nueva normalidad sería una incidencia acumulada a 14 días menor de 25 casos por cada 100.000 habitantes; una incidencia a siete días menor de 10 casos por cada 100.000 habitantes; una positividad inferior al 4%; una ocupación de camas de hospital por debajo del 2% y una tasa de nuevos ingresos menor de 5; y una ocupación de camas de UCI inferior al 5% y una tasa de nuevos ingresos menor de 1.