Examen final de septiembre en San Mamés

1. No entrar al trapo del fútbol de contacto, jugar

Benítez planteará un partido de anticipación. Robar el balón para impedir los arreones clásicos del Athletic, apoyado por su afición. Sabe, no obstante, que será un partido duro. Los locales buscarán el contacto. Y pide a sus hombres que no caigan en la trampa de las entradas fuertes y las reacciones, como le sucedió a Cristiano hace dos temporadas, que le costó la cartulina roja a los 66 minutos. Quiere que sus futbolistas solo piensen en jugar y ganar, no en responder.

2. Dar la cara: no arrugarse es fundamental

Benítez advierte a sus jugadores que Valverde reservó en Villarreal a Aduriz y Raúl García, que solo jugaron en el segundo tiempo, con la clara intención de tenerlos frescos como dupla ofensiva del ataque local. El entrenador madrileño ha puesto vídeos del rival a sus pupilos. Los centros aéreos a Aduriz serán la jugada principal del enemigo, mientras Raúl García se moverá entre líneas y cortará el ataque blanco con su dureza habitual. Los duelos del navarro con los madridistas son históricos. El técnico del Real Madrid ha hablado con sus hombres para que den la cara en todos los momentos del partido. Que no se arruguen ante el juego fuerte y la presión de la grada. Considera que hay que contestar con fútbol pero sin dejar de plantar cara. No ofrecer ni un atisbo de debilidad es fundamental para ganar.

3. Ramos quiere jugar y aún no está descartado

Con ese lema de dar la cara y no volverla atrás, Benítez desearía que Ramos estuviera en el césped de San Mamés. El año pasado también estaba lesionado y su ausencia se notó demasiado. Lesionado por una luxación en el hombro izquierdo ante el Shakthar Donetsk, ayer trabajó en el gimnasio. Habló con el míster. Y no se descartó. En la mañana de hoy se decidirá si viaja o no a Bilbao.

4. La potencia de Casemiro se hace necesaria

Quien vuela seguro es Casemiro, que hoy espera ser titular en un 4-4-2 con Modric, Kroos e Isco como compañeros del centro del campo. Es el único medio de potencia de la plantilla y su agresividad se hace necesaria en este combate. El brasileño aporta la fuerza que requiere el Real Madrid en los partidos correosos. Y ha mejorado mucho en la precisión del pase.

5. Dominar el partido, no permitir el balón aéreo

Benítez afirma que la manera de controlar el tempo del encuentro es dominar el balón desde el primer minuto. Ante el fútbol de pase largo y aéreo que intentará el Athletic, para evitar la posesión del rival, los blancos quieren rasear la pelota y domar a los leones con su calidad técnica. Es un duelo de estilos.

7. Presión arriba para no dejar jugar al Athletic

Otro aspecto técnico que Benítez ha trabajado para frenar al Athletic, que en casa juega en volandas aupado por su afición, es realizar la presión muy arriba para impedirle jugar. No dejarle sacar el balón en corto a sus laterales y forzar el patadón del portero al centro del campo para vender el balón. Que no se sienta a gusto. Ese «pressing» lo exigirá en todos sus encuentros a domicilio.

8. Kroos y Modric, más lejos de los centrales

El entrenador madridista ha estudiado con sus futbolistas las causas del flojo partido de su equipo frente al Granada y ha encontrado la razón: «Modric y Kroos jugaron muy atrás, cerca de los centrales, y no hubo buena circulación de balón». Por eso vimos un Kroos tan apagado. Les pide que suban metros y miren adelante para crear junto a Isco, Benzema y Cristiano.

9. Impedir el correcalles y el contragolpe local

La primera norma de Benítez para vencer en San Mamés es impedir que el Athletic aplique su contragolpe y convierta el duelo en un correcalles. Es lo que le gusta a Valverde. El técnico madrileño exige controlar el partido, mandar, dar pausa, no entrar en ese juego.