Keane triunfa en Sevilla con su pop melancólico para las masas

Con todos esos jugosos ingredientes salieron interpretando 'Can't Stop Now'. A continuación, Tom Chaplin saludó en inglés y mostró su gran satisfacción por tocar en Sevilla por primera vez y en un escenario tan especial como es la Plaza de España. En 'Silenced by the Night' pidió a los espectadores que aplaudieran, y el público respondió bien a tal petición.

Luego le tocó el turno a uno de los himnos de 'Hopes and Fears', 'Bend and Break', canción de pop melancólico a la estela de otros grupos como Coldplay o Travis que llegó a sentar las bases de una banda que apoya su sonido en el uso del piano eléctrico, prescindiendo de las guitarras. Tampoco faltaron temas como 'Nothing in My Way', de 'Under the Iron Sea' (2006), disco que terminó de consagrar a los ingleses.

A lo largo del concierto, Chaplin dio muestras de su gran simpatía y reveló que en la mañana habían ido a la Catedral y que luego había dormido una siesta por el «jodido calor». Acto seguido, y al igual que hiciera en su momento el añorado Freddie Mercury, realizó unos juegos vocales con sobreagudos e invitó al respetable a que coreara las mismas frases. A continuación cantaron uno de sus singles más vitalistas, 'You Are Young'. Pero el público explotó literalmente cuando sonaron las primeras notas de 'Everything is Changing', sin duda una de las obras maestras de los británicos.

Tras alcanzarse la primera cima del recital, Keane abrió el repertorio a su disco 'Perfect Simmetry' (2008), cantando el tema que le daba título al álbum. El público acabó dando palmas al estilo sevillano y Tom Chaplin quedó maravillado y dijo que «eso no lo podemos hacer en Inglaterra». Sin solución de continuidad tocaron otro de sus singles más melancólicos, 'Bad Dream'. Pero no todo fue tan solemne, ya que en el acervo musical de Keane también hay temas más movidos como 'Spiraling'.

Cuando Chaplin recordó el veinte aniversario de 'Hopes and Fears', los espectadores cantaron el cumpleaños y la banda interpretó posteriormente una de las mejores baladas de corte melancólico que se encontraban en ese disco, 'She Has no Time'. Unos minutos después salió a escena otro de los grandes himnos de ese magnífico álbum de debut, 'This is the Last Time'. A partir de ahí el concierto fue tomando vuelo con otros clásicos como 'Crystal Ball'.

En esa parte del concierto Chaplin ya se había ganado a todos los espectadores porque se le vio muy a gusto en la Plaza de España, por eso fue el momento ideal para que este cantante le dedicara a cada persona del público otro de los himnos de 'Hopes and Fears', 'Somewhere Only We Know'. Y entonces llegó uno de los temas más mágicos y melancólicos de la noche, 'We Might As Well Be Stranger'. Tras ese interludio de tranquilidad le tocó el turno a la canción de Keane favorita del vocalista, 'Sovereign Light Café', que llenó de colorido y alegría la noche.

Y aunque el cantante no dejó de mostrar simpatía y se entregó durante todo el espectáculo, anunció con evidente cansancio la que iba a ser la última canción para 'disgusto' de los espectadores. Entonces sonó 'Bedshaped', que culminó de forma perfecta una noche que será difícil de olvidar.