Probamos el Jeep Avenger: un buen comienzo

Para su debut en la movilidad eléctrica, Jeep se ha decantado por una carrocería de tipo SUV de 4,08 metros de longitud. Con este tamaño, el Avenger se enmarca en la categoría de los SUV urbanos o B-SUV, donde competirá entre otros con el DS3 Crossback, Opel Mokka-e o Peugeot e-2008, modelos con los que comparte plataforma, la e-CMP2, y sistema de propulsión.

A pesar de compartir esqueleto con otros modelos del grupo Stellantis, Jeep ha dotado al Avenger de personalidad propia, imprimiendo al modelo el ADN todoterreno y aventurero que caracteriza a la marca americana. Con un 60% de sus componentes específicamente Jeep, el Avenger presenta unos voladizos traseros y delanteros más cortos y una mayor altura libre al suelo, lo que le permite ofrecer un ángulo de ataque de 20 grados, un ángulo de salida de 32 grados y, en definitiva, una capacidad todoterreno que lo sitúa la cabeza del segmento en este sentido.

Para potenciar aún más su imagen offroad, Jeep pone a disposición de los clientes un catálogo de accesorios que permite una amplia personalización del vehículo con, por ejemplo, la posibilidad de elegir distintos patrones para la mítica parrilla de siete lamas, adhesivos para el capó y el techo o el color de las cubiertas de los retrovisores. Las posibilidades de personalización se completan con juegos de llantas de entre 16 y 18 pulgadas y una paleta de colores para la carrocería que, tomando su inspiración de la naturaleza, se compone de siete tonalidades: Rubí rojo, Volcán negro, Piedra gris arena, Lago azul, Sol, Granito y Nieve.

Interior del Jeep Avenger: moderno y colorido

El interior del primer coche eléctrico de Jeep presenta un diseño moderno y práctico gracias, entre otras cosas, a los muchos huecos disponibles para dejar objetos y a que la marca, en contra de la tendencia actual, no ha prescindido de los botones físicos, dedicando un módulo específico para el sistema de climatización.

Los materiales empleados en el habitáculo son todos de plástico duro, pero el aspecto es bueno. Además, la marca permite elegir el color de algunas molduras como la que recorre el salpicadero de lado a lado poniendo un toque juvenil y fresco al interior.

En cuanto a digitalización, el Jeep Avenger cuenta con una pantalla táctil de 10,1 pulgadas que es compatible con Android Auto y Apple CarPlay de forma inalámbrica. El cuadro de instrumentos es también un panel digital de 7» en la versión básica y de 10,25» en el resto.

En lo que respecta a espacio, las plazas traseras del Jeep Avenger no son demasiadas amplias y solo viajarán cómodas dos personas. El maletero cubica 355 litros (380 litros en el gasolina) y puede contar con apertura y cierre automáticos para el portón

Motor y autonomía del Jeep Avenger

El sistema de propulsión del Jeep Avenger está compuesto por un motor de 156 CV y 260 Nm y una batería de 54 kWh de capacidad bruta. La potencia, que se entrega de manera inmediata, resulta más que suficiente para mover con soltura al vehículo, que completa el 0 a 100 km/h en 9 segundos. La entrega de potencia varía en función del modo de conducción escogido: Eco, Normal y Sport.

En cuanto a la autonomía, el Jeep Avenger homologa un consumo combinado de 15,4 kWh/100 km que le permiten recorrer hasta 400 kilómetros. Según la marca, si los trayectos son exclusivamente urbanos, se puede alcanzar una autonomía de 550 kilómetros.

La potencia máxima de carga admitida es de 100 kW en corriente continua. En ese caso, el Avenger pasaría de un 20 a un 80% de carga en 24 minutos. En corriente alterna, la potencia máxima admitida es de 11 kW.

Además de la versión eléctrica, Jeep pondrá en venta una variante de gasolina en los mercados de España, Portugal y Polonia. Disponible solo con cambio manual, monta un bloque turboalimentado de tres cilindros y 1,2 litros de cubicaje que desarrolla 101 CV y 205 Nm.

Cómodo y silencioso

Durante la prueba dinámica por las carreteras de Málaga, pudimos comprobar que el Jeep Avenger es un vehículo que trata bien a sus pasajeros, brindando un gran confort de marcha gracias al silencio de marcha y el ajuste de la suspensión.

Además, se mostró bastante ágil en los tramos más revirados de la ruta, con una respuesta rápida y una buena entrada en las curvas. La dirección, eso sí, la encontramos demasiado asistida y poco informativa. En ciudad, al menos, resultará muy cómoda para maniobrar. En este sentido, cabe destacar también el buen radio de giro, con tan solo 10,5 metros entre bordillos.

Fabricado en Polonia, el Jeep Avenger ya está disponible en los concesionarios con un precio de partida de 36.400 euros para la versión eléctrica y 22.850 euros para la de gasolina.