Cupra Formentor VZ 310 CV: declaración de intenciones

Hablamos, obviamente, de un SUV de corte deportivo que escapa de la tradicional silueta de tipo coupé pero que sí ofrece un diseño agresivo y notorio, más en la línea del BMW X2 que, por ejemplo, el Audi Q3 Sportback. Lo más llamativo son sin duda sus líneas bien marcadas que ofrecen un diseño musculoso y llamativo. A destacar las llantas de aleación de 19 pulgadas que se ofertan de serie, la tira de LED que conecta los pilotos traseros o la doble salida de escape doble con tomas reales. Tampoco desentona la pintura con efecto mate de nuestra unidad o los rasgos propios de los SUV como son las protecciones en los pasos de rueda.

De puertas para dentro hay un perfecto equilibrio entre deportividad y calidad, aunque el hecho de que Cupra se posicione un punto por encima de Seat podría haber significado también el mostrarnos un interior diferente al de, por ejemplo, el Cupra León. En este sentido, la pantalla central de 12 pulgadas es, quizá, el único elemento que lo diferencia junto con los excepcionales asientos de corte deportivo que también se ofertan de serie y que pueden estar tapizados en un llamativísimo cuero Alcántara bautizado como Petrol Blue.

El volante incrusta el botón de arranque y el selector de modos de conducción , elemento este último muy útil para no tener que pasar por el monitor central. Y es que dicha pantalla aglutina toda la información y funciones del coche, incluyendo la climatización y haciendo algo engorroso su manejo cuando estamos en marcha.

En términos de habitabilidad, que el Formentor mida 4,45 metros de largo se nota en el interior. Porque su batalla es ligeramente superior a la de un Cupra Ateca permitiendo así que los ocupantes traseros gocen de mayor hueco para las piernas . La altura es justa para alguien que mida más de 1,85 metros mientras que por anchura seguirá siendo más práctico que viajen dos a tres. En cuanto al maletero, los 420 litros que cubica quizá parezcan algo justos pero al menos el hueco es bastante regular. Quien busque más espacio, podrá optar por el Formentor básico, el de 150 CV, que incrementa dicho volumen hasta los 450 litros dada la ausencia de la tracción total.

Más allá de las impresiones estéticas y visuales, lo que realmente enamora de este Formentor VZ 310 CV es la conjunción chasis-motor. Cupra nos ha demostrado que lleva en la sangre lo de crear coches deportivos y pese a ser un SUV, el Formentor es uno de los modelos más dinámicos de su categoría. Comenzando por la puesta a punto del chasis, con una reactividad encomiable y un aplomo altísimo.

Sobresale el tacto de la dirección , con un guiado preciso que nos permite entrar en curva con rapidez, mientras que la suspensión con amortiguadores adaptativos nos brinda hasta 15 posibilidades de reglaje en el modo individual, pasando de uno mucho más blando al estándar que ofrece en el modo Comfort hasta otro más firme incluso que en el modo Cupra.

La capacidad de tracción es altísima determinada por el sistema 4Drive que no solo reparte la fuerza entre ambos ejes sino que gracias al diferencial trasero mejorado se consigue también repartir el par entre las ruedas. Todo para brindarnos un conjunto carente de inercias, de subvirajes incluso si decidimos poner el ESC en modo Sport y 'liberar' ligeramente la zaga . En él todo fluye y se puede ir realmente rápido a nada que nos lo propongamos.

Otro de los responsables, el motor. El archiconocido 2.0 TSI del Grupo Volkswagen vuelve a hacer de las suyas con un rendimiento exquisito. En este Formentor VZ genera nada menos que 310 CV entre las 5.100 y las 6.500 rpm al que acompaña un par máximo de 400 Nm entre las 2.000 y las 5.450 vueltas . Bastan dos acelerones para comprobar por qué Cupra le ha sumado las siglas VZ ya que aparentemente derivan de la palabra 'veloz'. Porque este Formentor corre y mucho. Acelera de 0 a 100 km/h en 4,9 segundos y llega a los 250 km/h con facilidad.

El motor empuja con contundencia desde que rozamos el pedal derecho, trabajando de manera perfecta con la transmisión automática DSG de siete relaciones que, como es habitual, permite realizar transiciones rápidas en conducción deportiva pero peca de ser demasiado conservadora a la hora de querer estirar el rango de revoluciones hasta la zona roja.

La guinda a este conjunto la ponen un equipo de frenos a la altura como son los opcionales firmados por Brembo con discos ventilados y perforados de 370 mm de diámetro . Cuestan 2.500 € que a priori pueden parecer excesivos pero que son casi obligatorios si lo que buscamos es llevarlo siempre en modo Cupra. En este sentido, una apreciación mejorable: el sonido . Teniendo en cuenta que el Cupra Ateca está disponible con un sistema de escape Akrapovic, no hubiera estado de más que el Formentor VZ pudiera al menos montarlo en opción. Porque aunque su melodía no sea tan artificial como en el Cupra Leon e-Hybrid, el gorgoteo del 2.0 TSI da para ofrecer un mayor juego y no tener que recurrir a cierta artificialidad que se cuela por los altavoces.

Tener un estreno de tal calado no es nada fácil. Quizá nos repitamos, pero Cupra ha demostrado que sabe hacer deportivos sea en el formato que sea. Con el Formentor la firma española pretende llenar las carreteras. Quizá no sea de este VZ 310 CV y ni mucho menos del VZ5, pero con la nueva gama de 150 CV y, sobre todo, con los híbridos enchufables, será uno de los modelos que más veamos rodar durante este 2021 .

Más allá de la versión, será fácil de identificar por lo extravagante de su diseño y por lo mucho que cautiva una vez que podemos enlazar unas cuantas curvas con él. Además, quien piense que el precio es una barrera para adquirirle ha de saber que los 44.920 € son una tarifa más que ajustada para un coche que nos brinda una experiencia de conducción tal elevada.