Cómo cargar la batería de tu coche eléctrico este verano

Las ventas de coches electrificados en España suponen ya un 7,7% de cuota en lo que va de año, con 5.704 matriculaciones

Las temperaturas elevadas deterioran más rápidamente las baterías ABC

Madrid

08/08/2022 a las 00:54h.

Los coches eléctricos y electrificados ya suponen una cuota del 7,7%, con 5.704 ventas en lo que va de año. Las etiquetas cero son ya una realidad en las carreteras españolas y aunque gran parte de la población ya ha tenido contacto cercano ... con algún vehículo cero emisiones, y ya es fácil encontrarlos de alquiler, aún no todos los ciudadanos conocen las mejores prácticas para recargar.

Uno de los factores más importantes que influyen en el rendimiento de las baterías del coche eléctrico es la temperatura. En ambientes muy fríos, los tiempos de carga se pueden multiplicar por tres y la autonomía verse reducida en un 12%. El calor, en cambio, más que afectar a los tiempos de carga daña la química de las baterías, reduciendo su vida útil.

Las temperaturas elevadas tienen el mismo efecto en los acumuladores —concretamente, en la barrera protectora del ánodo— que el utilizar cargas rápidas. Técnicamente, hacen que los iones se muevan con más fuerza, generando fracturas a nivel molecular que aumentan la superficie para reacciones secundarias que pueden generar elementos inertes que limiten el flujo de energía.

Cargar un vehículo eléctrico es muy sencillo, pero sus baterías se pueden degradar más rápidamente si no se tiene el cuidado adecuado, como ocurre con los teléfonos móviles. Según Ecoflow, una empresa especializada en generadores y baterías portátiles con la capacidad suficiente para cargar un coche cero emisiones, solo hay que tener en cuenta algunas máximas.

La primera de ellas es siempre usar el propio coche como el punto final de la cadena. Esto significa que el cable se conectará primero al cargador y luego al coche y se seguirá el orden inverso al desenchufar: primero el coche y luego el cargador.

Luego, los tiempos de carga tienen que ser maximizados. La carga rápida es más conveniente —especialmente si se trata de una parada en un viaje—, pero la lenta es menos agresiva con la química de la batería.

El mejor momento para cargar el coche es hacerlo por la noche, con la tarifa súper valle, en donde el coste por restaurar 100 kilómetros está en torno a 1 o 1,5 euros. Los fabricantes de vehículos recomiendan que la carga se haga entre el 20% y el 80% de la capacidad de la batería, que es cuando el tiempo es más rápido —en los extremos, se reduce a la mitad—.

Si se tiene que recargar fuera de casa, lo mejor es planear las paradas en la ruta. Existen varias aplicaciones para el teléfono que indican el mapa de cargadores con sus precios, por lo que hay que buscar puntos intermedios para evitar la ansiedad de autonomía.

Los coches eléctricos vienen con una cantidad de accesorios que no eran habituales de ver en los de combustión. De ellos, probablemente el más importante sea el cable de carga. Si se notan problemas en la recarga, es esencial revisarlo, porque puede suponer una amenaza a la seguridad e incluso riesgos de incendio.