Madrid 2020: Una mujer talismán y un hombre de oro

Compartiendo taxi llegan Joel González y Theresa Zabell . El primero es un valor seguro de nuestro deporte, lo ha ganado todo en taekwondo. La segunda es vicepresidenta primera del COE, un peso pesado de nuestra candidatura. Joel trae enrollado un cinturón negro y Theresa la maqueta de un barco de la clase 470 como el que la llevó al oro olímpico en Barcelona 92 y Atlanta 96. Los dos ya se conocen porque, cada uno a su manera, están trabajando para que Madrid acoja los Juegos Olímpicos.

Él lleva un polo rojo que le distingue como unos de los abanderados de Madrid 2020 . Ella es la encargada de llevar las Relaciones Internacionales de la candidatura y no abandona ese papel en ningún momento. Habla cuatro idiomas y sobre ella recae buena parte de la responsabilidad a la hora de ganar votos en el complicado entorno que rodea al Comité Olímpico Internacional (COI).

Los dos van camino del Pabellón número 4 de Ifema comentando lo que ha sido una mañana de intensa actividad en pro de Madrid 2020 . Avanzan un poco sorprendidos con la inmesidad de La Feria, que parece más grande ahora que está vacía. En esos mismos pabellones se decidirán buena parte de las medallas si Madrid organiza los Juegos del 2020. El tenis de mesa, la esgrima y otros muchos deportes, con pabellones para 5.000 y 8.000 espectadores, estarán en la Feria de Madrid. Es una instalación amplia, accesible y con el aeropuerto a tiro de piedra. Sería uno de los epicentros de los Juegos Olímpicos.

Theresa Zabell no esconde su admiración por Joel, que hace apenas un año se colgó el oro olímpico en Londres. Ella, retirada hace tiempo, recuerda su papel de «mujer talismán» en los últimos Juegos. Estuvo presente en casi todas las finales donde los españoles consiguieron medalla. «Me paraban por la Villa Olímpica y me decían que fuera a verles competir, que les traía buena suerte», confiesa.

Joel recuerda también las semanas que pasó en Londres. «La gente me empezó a pedir entrevistas cuando un periódico inglés dijo que yo iba a ser el único oro español. Afortunadamente conseguimos más medallas», explica. Para muchos, fue una agradable sorpresa verle lograr el metal.

Para la foto, el taekwondista y Theresa intercambian sus «juguetes». Joel regala a la cámara una patada espectacular. Theresa, algo más institucional, valora por dónde pasan las opciones de Madrid de hacerse con los Juegos. Una clave: al COI no se puede ir con exigencias.

«Tú no le puedes decir al Comité Olímpico que mereces los Juegos. No se puede afrontar así la negociación. Es como si yo le dijera al fotógrafo cómo tiene que hacer las fotos», explica. «Madrid le está ofreciendo al movimiento olímpico una nueva manera de enfocar su producto. Creo que estamos mostrando el camino a seguir a partir de ahora. El cómo organizar unos Juegos más allá de las cuatro o cinco grandes ciudades como Nueva York, París o Londres», añade.

Entre patada y patada, Joel González, gerundense de 23 años, echa cuentas para ver en qué condiciones físicas llegaría a la cita olímpica de 2020. «Tendría justo 30 años, no está mal. Con esa edad se puede competir a mucho nivel todavía», asegura. No le falta razón, aunque en su disciplina suelen ser los más jóvenes los que llevan la voz cantante.

Joel, como abanderado que es, estará muy atento a lo que ocurra en Buenos Aires el próximo sábado . Se muestra prudente pero consciente del potencial de la ciudad y apela al apoyo popular para defender la candidatura. «Creo que debe conseguir los Juegos porque todo español es amante del Deporte. Pienso que sería un impulso para disciplinas menos conocidas como la mía además de un empujón social, económico y anímico que tanta falta hace en España», concluye.