El Plan del Tajo incluye caudal un mínimo de 400 hm3 en los embalses de cabecera

Como dato más significativo, la propuesta del Gobierno de España casi duplica la reserva mínima estratégica actual no trasvasable de los embalses de Entrepeñas y Buendía, pasando de 240 hectómetro cúbicos a 400 . En este sentido, cabe recordar que en su momento el gobierno regional que presidía José Bono señaló, cuando se estableció la reserva en 240 hectómetros, que «todos los objetivos que nos hemos planteado en el Tajo están conseguidos, todos ¿cabe mayor satisfacción?», y añadió que «algunas veces, ni siquiera en mis sueños más optimistas con respecto al Tajo, podía imaginar estos objetivos».

Otro de los aspectos fundamentales es el objetivo de mejorar la calidad de las aguas, y para eso, además de la reserva en cabecera, se recoge en el borrador la garantía de unos caudales mínimos en al menos veinte puntos de la cuenca. Los más destacados son los 6 metros cúbicos por segundo al paso del río por Aranjuez, que se eleva hasta los 10 tanto en Toledo como en Talavera. Este precisamente este el caso más significativo, porque se pasa de no tener reconocido ningún caudal a 10 metros cúbicos, terminando con un olvido secular. Hay que tener presente que Talavera se considera un punto crítico de la cuenca del Tajo, ya que el volumen medio de agua que circula por el río ha sido en algunos años en el mes de julio inferior a dos metros cúbicos por segundo. Con este plan se multiplicaría por cinco el caudal del río en Talavera.

Este plan, según el Partido Popular, h a sido fruto del «consenso y el diálogo» y del trabajo de la presidenta regional y la consejera de Fomento , al tiempo que representa «el pilar de lao que debe ser el debate del agua», porque «abandona las guerras y los titulares vacíos de contenido», dijo la diputada regional Cesárea Arnedo.

Para el gobierno autonómico, el texto presentado garantiza la demanda de agua, incluso en época de sequía, para usos industriales y de regadío (150.000 hectáreas), así como el suministro de agua potable a un millón de personas de las provincias de Cuenca, Guadalajara y Toledo.

Las reacciones nada más conocerse el plan fueron ayer numerosas, tanto dentro de la Comunidad como de fuera. Así, desde Murcia el consejero de Agricultura y Agua, Antonio Cerdá, calificó el acuerdo de «muy positivo», pero por el hecho de que se permite que el trasvase Tajo-Segura sea una obra «viva» y, por tanto, siga funcionando. Pero lo cierto es que la coincidencia es que el Plan del Tajo ha dejado tocado al trasvase, que aunque no muere sí queda mutilado por ahora debido a las drásticas restricciones que impone el borrador, sobre todo porque merma la capacidad para generar excedentes en el sistema de Entrepeñas y Buendía para atender los abastecimientos y regadíos de Murcia, Alicante y Almería, según informa Manuel Buitrago.

El propio ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete, valoró el diálogo «muy importante» entre las comunidades autónomas del levante español y Castilla-La Mancha y de Madrid para regular «uno de los ríos más complejos de regular de España y para poner en marcha su plan de cuenca, que tenía que haber estado hecho en 2009». El secretario de Estado de Medio Ambiente, Federico Ramos, señaló ayer que la aprobación de este plan es un «paso decisivo hacia el avance hacia la planificación hidrológica nacional».

En parecidos términos se pronunció el delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, Jesús Labrador , quien destacó que el borrador es una «muy buena noticia» porque «se ha hecho desde el consenso» y, además, valoró que el Gobierno central, del PP, «da soluciones reales al agua». Añadió que el borrador del plan del Tajo «pone de manifiesto que el Gobierno del PP, como ya ocurrió en el anterior Plan Hidrológico Nacional, da soluciones reales al agua», y destacó que el trabajo se ha hecho «en equipo» con el Gobierno de María Dolores de Cospedal.

Desde Talavera las reacciones fueron varias y diferentes. El alcalde de la ciudad, Gonzalo Lago, destacó que «hoy el Tajo vuelve a ser río» y calificó de «hito histórico» conseguir una reserva de 400 hectómetros. Según Lago, la propuesta del plan de cuenca «demuestra que el PP se preocupa por el agua de nuestra ciudad y nuestros regantes», al tiempo que resaltó que el caudal para Talavera se fija incluso para los meses más duros del año y para épocas de sequía y verano. También acusó al PSOE de no haber conseguido esto tras sus años de gobierno.

Miguel Ángel Sánchez, portavoz de la Plataforma en Defensa del Tajo y el Alberche de Talavera , señaló que el borrador supone un «punto de inflexión» en la gestión del Tajo, pues supone que el el trasvase al Segura «deja de ser prioritario». Sin embargo, su compañero de plataforma, Miguel Méndez, habló de «cautela» y de que es necesario «leer la letra pequeña ante posibles trucos», si bien dijo que satisface «parcialmente» las demandas.

Desde el sector empresarial, tanto Cecam como Fedeto manifestaron su satisfacción por el borrador del plan de cuenca. También la organización Asaja felicitó tanto a la presidenta Cospedal como al ministro Arias Cañete por el acuerdo, y calificó de «increíble» que casi se doble la cifra de agua como reserva mínima.

En el lado crítico se situó de manera frontal el PSOE regional. Su portavoz, Cristina Maestre, dijo que el documento perpetúa el trasvase Tajo-Segura y reduce en un 40% los caudales ecológicos. En su opinión, supone «la consumación de la traición de Cospedal a Castilla-La Mancha». Añadió que es la «liquidación de Castilla-La Mancha» por parte de su presidenta, María Dolores de Cospedal, en favor de sus intereses partidarios. También aseguró que Cospedal se llegó a reunir en la sede del PP en la calle Génova con los regantes de Murcia y Valencia, lo que ha tachado de «deslealtad» a Castilla-La Mancha.

Desde el PSOE del Ayuntamiento de Toledo, su portavoz, Rafael Perezagua, tachó de «puñalada» para el río disminuir su caudal ecológico en Aranjuez, Toledo y Talavera, pero eso con relación al borrador que se publicó en septiembre de 2011 en la web de la Confederación Hidrográfica del Tajo, en el que se fijaba un caudal mínimo de 10,8 metros cúbicos para Aranjuez, de 14 a 10 en Toledo y de 15,92 a 10 en Talavera. ’Perezagua añadió que el Ayuntamiento convocará «en muy pocas fechas» un pleno extraordinario con el fin de que los 25 concejales del Ayuntamiento tomen una decisión «que defienda de una vez por todas al río Tajo, en relación a su caudal, la calidad y las reservas de cabecera».

Según la propuesta que este miércoles se ha publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE), el caudal en los embalses de cabecera del Tajo, Entrepeñas y Buendía se incrementará de forma paulatina en un plazo máximo de cinco años desde los 240 hectómetros cúbicos actuales hasta los 400. Esto se aplicaría de forma automática si las lluvias permitieran que el agua embalsada llegase a los 900 hectómetros cúbicos. De no ser así, se establecerían otros mecanismos para alcanzar ese volumen de lámina, garantizando al mismo tiempo el caudal a su paso por Toledo y Talavera.

Asimismo, el plan propone un caudal mínimo en Arajuez (Madrid) de 6 metros cúbicos por segundo.

A partir de este miércoles se abre un período de seis meses para presentar alegaciones y sugerencias.