Manuel Jove: «No podía sospechar que el Banco de España me iba a perjudicar»

El empresario gallego ha explicado, durante su declaración de esta mañana, que confió en el supervisor bancario y las garantías que ofrecía una entidad que, a la vista de las cuentas que le aportaron (en agosto de 2012), «parecía rentable». Inveravante desembolsó en la antigua NCG -hoy Abanca- 6 millones de euros.

También ha remarcado, a preguntas de su letrado, que se les transmitió que la entidad estaba saneada. «De lo contrario, no hubiéramos entrado», ha añadido en línea con el argumento de otros empresarios que han prestado también declaración.

«A nosotros se nos vendió que estaba bien», ha resumido Manuel Rodríguez, presidente de los astilleros MetalShips & Docks, propiedad del grupo Rodman. Este empresario ha rechazado, además, que se les informase, -antes de su entrada como inversores-, del ajuste contable de unos 1.000 millones que se aplicó en 2012. «Simplemente nos metieron la mano en el bolsillo», ha añadido.