La antigua cúpula de Anova constituye una corriente contra Beiras
Se presenta Cerna con el objetivo de devolver el partido a la filosofía de sus orígenes
J. PAN
Ayer se presentó oficialmente una más de las incontables corrientes internas en las que se divide el nacionalismo gallego: Cerna, que nace en el seno de Anova-Irmandade Nacionalista y que reivindica representar la auténtica esencia del partido que lideran Xosé Manuel Beiras y Martiño ... Noriega. Sorprende, no obstante, la nómina de personas que se encuentran detrás de esta corriente, con ganas de retomar ese Novo Proxecto Común que, allá por 2012, pretendía reunificar el nacionalismo al margen del BNG. No son otros que los que, hasta hace un par de meses, controlaban férreamente Anova, el núcleo duro del llamado Encontro Irmandiño. Detrás de Cerna pueden adivinarse nombres como los de Luís Eyré «Palleiro», exsecretario de Relacións Políticas, Mario López Rico, que llevaba Comunicación, y la joven Paula Vázquez Verao, antigua responsable de Organización y que ayer se erigió en la cara visible de Cerna.
Todo este sector dimitió en bloque de la Permanente (la ejecutiva de Anova) cuando, en marzo, los militantes votaron concurrir a las elecciones europeas junto con Izquierda Unida, una alianza que los «irmandiños» denostaban y que, al consumarse, volvió a aupar al poder a Noriega, que había renunciado a su cargo dentro de la organización el pasado diciembre.
Todos estos intrincados movimientos tectónicos se saldan, a día de hoy, con un antiguo núcleo duro de Anova —y cuyos integrantes de mayor edad eran del círculo íntimo de Beiras— ahora convertido en sector crítico y centro de la oposición interna a los designios del de Brión y su mano derecha, el actual alcalde de Teo.
Además de Verao, participaron en la presentación de Cerna la concejal de Bueu Laura Ogando y Paulo Escobero, mientras que los impulsores más vinculados con el antiguo Encontro Irmandiño prefirieron permanecer en un discreto segundo plano. Sus propuestas para Anova tienen un cierto parecido con las de Podemos: «quiebra democrática», «echar fuera la corrupción», «candidaturas desde la ciudadanía» y «democracia radical».
Quien se mostró preocupado por el alumbramiento de Cerna fue Noriega, que anteayer aseguró en la Cadena SER que existe la posibilidad de una ruptura interna como la que vivió en el BNG en 2012, tras la Asamblea de Amio.
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