Beiras se encara con Feijóo en medio del pleno más bronco

No obstante, el titular de San Caetano volvió a asegurar que no sabía a qué se dedicaba Dorado mientras mantenía una relación de ocio con él y arremetió contra el líder del PSdeG, «Pachi» Vázquez, por «acusar sin acusar y condenar sin condenar». «Usted no merece ni el respeto ni la respuesta que me solicita», espetó al socialista, quien se escudó en Internet para explicar que el nombre del presidente aparece si se busca «Galicia, narcotráfico».

También el portavoz parlamentario del BNG, Francisco Jorquera, censuró la actitud de Feijóo, al que volvió a pedir su dimisión. «Lleva una sombra sobre usted que lo acompañará a donde vaya, causándole un gravísimo daño a la imagen de nuestro país», añadió el nacionalista elevando el tono.

Feijóo, que recordó que fue el bipartito el que concedió la subvención más grande a empresas vinculadas con Dorado y que, según él, la entregó «un conselleiro nacionalista» inmerso en una operación judicial (se refería a Fernando Branco, imputado en la «operación Campeón»), tachó el comportamiento sobreactuado de Jorquera, al que comparó con Xosé Manuel Beiras.

«Solo le quedan dos cosas, sacar el zapato o emocionarse tanto, tanto...», esgrimió el presidente autonómico en tono irónico. Entre la indignación, el portavoz de AGE, aludido por el comentario, se levantó de su escaño enfurecido y se dirigió hasta el asiento de Feijóo, encarándose con él, golpeando sobre su escaño e interrumpiendo su turno de palabra pidiéndole «decencia».

Ante la algarabía suscitada -todos los diputados comezaron a increparse entre ellos-, la presidenta de la Cámara, Pilar Rojo, le recordó a Beiras que «usted es un diputado y tiene que guardar disciplina», ante lo que el histórico dirigente nacionalista contestó: «Me voy porque no hay dios que lo aguante». Y Beiras, un día más, se fue por la puerta de atrás.

Tras lo sucedido, Feijóo instó a la viceportavoz de AGE, Yolanda Díaz, -que tomaba el turno de palabra en ese momento- a «pedir disculpas por lo que acaba de pasar», un extremo que Díaz rechazó afanándose en hablar de Marcial Dorado. El de San Caetano, que declinó utilizar su primer turno de réplica para contestar a la espera de unas disculpas, utilizó la segunda vuelta para asegurar que «como presidente de Galicia no voy a admitir un trato vejatorio».

«Lo que ocurrió hoy en el Parlamento de Galicia no ocurrió nunca en un Parlamento europeo». «Señora, usted no merece hoy por hoy ninguna respuesta», apuntó Feijóo, que avanzó que remitirá a la Cámara los datos correspondientes acerca de las ayudas dadas en la etapa Fraga a empresas vinculadas con Dorado. Desde el PP, Marta Rodríguez Arias solicitó la dimisión de Beiras porque «es un diputado agresivo» y, tras lo acontecido, «no se sabe a dónde puede llegar». Su actitud «ha superado todos los límites, con creces, de la historia del Parlamento», subrayó.