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Los cinco grandes retos del nuevo director del IVAM
En los próximos seis años, Cortés deberá relanzar la imagen del museo y ganarse la confianza del sector
Los cinco grandes retos del nuevo director del IVAM
Está previsto que la consellera de Cultura, María José Catalá, ratifique el nombramiento de José Miguel Cortés como nuevo director del IVAM la próxima semana . Hasta entonces no podremos saber qué plan estratégico ha diseñado el teórico y crítico de arte valenciano para relanzar ... este museo, que vive sus horas más bajas. Estos son algunos de los principales desafíos a los que deberá hacer frente el nuevo director gerente durante los próximos seis años.
Recuperar el prestigio perdido
La historia del Instituto Valenciano de Arte Moderno (IVAM), que se remonta 25 años atrás, está jalonada de hitos. Fue el primer museo de arte moderno fundado en España, y durante años ha sido un referente a nivel internacional, no solo como principal depositario del legado de Julio González, sino por haber acogido exposiciones para el recuerdo, como la de George Braque, Baselitz, Rodin, James Turrell y Rauschenberg, por poner algunos ejemplos.
Para volver a la senda del prestigio, el museo valenciano tendrá que ganarse de nuevo la confianza y el respeto del público, los artistas y los colectivos del sector, cuyos intereses no necesariamente coinciden siempre.
La buena sintonía de José Miguel Cortés con críticos y galeristas hace pensar que este reto será relativamente fácil de superar para el director entrante, aunque su condición de protegido de Ciscar siga levantando suspicacias.
Lidiar con el presupuesto
No es fácil sacarle brillo a un museo cuando el presupuesto vive mínimos históricos. El IVAM ha visto reducida su asignación drásticamente, hasta situarse en los 5,5 millones actuales. No hay solvencia suficiente para cubrir la programación con ambiciosas producciones propias, y ya se ha estirado al máximo el socorrido recurso de sacar de los almacenes la colección propia.
En este sentido, José Miguel García Cortés cuenta con la ventaja de haber gestionado durante cinco años el Espai d’Art Contemporani de Castelló (EACC), un centro de presupuesto humilde que consiguió llamar la atención con una programación poco convencional y más orientada a la reflexión teórica que a la exhibición de grandes obras canónicas del arte moderno.
Otra de sus funciones como director del IVAM será la de luchar para que el Ministerio de Cultura aumente su asignación anual al museo, que en 2013-2014 ha sido de tan solo 160.000 euros.
Dotar al IVAM de personalidad propia y coherente
No se trata de deshacer los logros acometidos por los directores precedentes, sino de saber hacer aportaciones sustanciales al panorama museístico nacional. Dejar una impronta novedosa, pero coherente.
Colección del museo
Todos los directores que han pasado por el IVAM han aportado su grano de arena a los fondos del museo, que hoy cuentan con 10.909 obras (de las que el 62% son donaciones). Más allá de ser un mero contenedor de exposiciones temporales, los museos contemporáneos de cierta envergadura han de mantener vivo su propio legado, enriqueciéndolo con nuevas adquisiciones que refuercen su discurso interno, o abriendo nuevas directrices. Cortés tiene ante sí el desafío de seguir adelante con este cometido en un periodo todavía poco halagüeño.
Política de transparencia
La petición por parte del grupo parlamentario EUPV de una auditoría especial sobre el periodo en que Consuelo Ciscar dirigió el IVAM (2005-2014) pone de manifiesto las sospechas (nunca demostradas por ningún tribunal) de que en la gestión de la esposa de Rafael Blasco se han producido irregularidades. El encarcelamiento del empresario chino Gao Ping (a quien el IVAM adquirió más de 60 obras obras por un precio muy superior al de mercado) puso muchos argumentos en bandeja a quienes aseguraban que Ciscar utilizaba el museo en beneficio de sus amigos y familiares.
Cortés tendrá ahora la oportunidad de mejorar la imagen del museo, para lo que será esencial una gestión racional de los gastos y una programación expositiva ajena a las redes clientelares. También tiene en su mano desmentir con sus actos a quienes aseguran que sigue siendo un pupilo de su antecesora.
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