Villarrubia anima a que se presenten más candidatos y descarta pactar con Tudanca

Quizá por eso, Villarrubia espetó ayer con fuerza que «ya está bien de bicefalias y deslealtades. Presento una candidatura rebelde y valiente para un proceso en el que son los militantes los que tienen que decir lo que es y debe ser el PSOE de esta tierra». Y quizá por lo escaldado que salió de su coexistencia política con López, el diputado nacional palentino descartó ayer con rotundidad cualquier tipo de pacto previo al 4 de octubre, día fijado para que la militancia acuda a las urnas. «Nada de una única candidatura, quiero que haya más de dos si es posible», afirmó Villarrubia, consciente de que un mayor número de aspirantes puede beneficiarle. Sobre este asunto, añadió que no quiere «consensos de restaurante, y mucho menos intrigas y conspiraciones», en clara alusión a la comida celebrada el 19 de agosto en Palencia a la que acudieron Ana Redondo y el alcalde de La Granaja, José Luis Vázquez, entre otros.

Referencias ácidas a ciertos comportamientos de destacados socialistas al margen, Villarrubia negó tener la sensación de que Luis Tudanca sea el candidato preferido por el aparato del partido. «Ni yo ni nadie lo entendería, estoy convencido de que la Ejecutiva Federal estará ilusionada con este proceso abierto en Castillla y León, con varias candidaturas como ocurrió en julio con la eleccion del secretario general». La afirmación sonó a una mezcla perfecta de ironía, y asi lo entendió la concurrencia al esbozar una sonrisa cómplice y generalizada.

Arropado por dirigentes socialistas de Valladolid, Zamora, León y Salamanca y muchos palentinos, Villarrubia afirmó que si resulta elegido contará «con todos, porque entre todos los socialistas de esta tierra tenemos que luchar para conseguir un cambio político en la Comunidad». Villarrubia definió a Tudanca como «un gran candidato, al que respeto y valoro el gesto de dar el paso de significarse por el proyecto de Castilla y León».

En cuanto a sus retos, señaló que defiende «a los políticos de raza, no a los de laboratorio». Aludió además a la ética como «el primer valor de la política», al tiempo que dijo comprometerse a «aumentar la democracia interna y recuperar la credibilidad».

De forma velada se refirió a López cuando aseguró que si lidera el partido en la comunidad apostará por senadores autonómicos que «vivan por y para esta tierra». No obstante, y a corto plazo, Villarrubia comprometió lealtad de cara a la inminente votación para que ocupe un escaño en la Cámara Alta de aquí al final de la legislatura. Lo cortés no quita lo valiente, vino a decir. O eso se le entendió...