¡Vamos a la playa!

Ávila es la provincia que más localizaciones tiene. Cuenta con nada más y nada menos que siete, cuatro en ríos, concretamente en el Arenal y Pelayo, en Arenas de San Pedro, en el río Cantos de El Hornillo y en el Tormes, en La Horcajada; dos en gargantas, la de Los Caballeros, en Navalonguilla, y la del Tiétar en Gavilanes; y una en el arroyo Cimorro, en Navalacruz.

La siguiente en la lista es León, con cinco puntos para bañarse: una en el lago Carucedo, en el municipio con el mismo nombre, y las restantes de nuevo en ríos, en Cimanes del Tejar y Llamas de la Ribera (Órbigo), Boeza (Igüeña), Ancares y Cúa (Vega de la Espinareda).

En Zamora hay la misma cantidad de emplazamientos que en León. En el río Tera en Burganes de Valverde, en el Lago de Sanabria, que cuenta con dos localizaciones (Ribadelago y Vigo) y los embalses de Valparaíso (Villardeciervos) y Ricobayo (Muelas del Pan).

Soria es la cuarta en discordia, con tres zonas en el embalse de Cuerda del Pozo (en Soria capital, Cidones y Vinuesa) y una más en el río Duero, a su paso por Esteban de Gormaz.

En Burgos y Palencia hay dos más por provincia, como son las del río Arlanzón en la capital y la del Embalse del Ebro en Arija y los embalses de Ruesga y Aguilar de Campoo, en Cervera de Pisuerga.

Por último, tanto en Salamanca como en Segovia y Valladolid hay un espacio en cada una: el Puente del Congosto (río Tormes), Maderuelo (embalse de Linares del Arroyo) y la capital vallisoletana (playa en el río Pisuerga), respectivamente. Unos bonitos lugares donde darse un bañito.