Emergencias del País Vasco «no valoró adecuadamente» la «gravedad» de la niña de Treviño que «agonizaba»

La investigación propia del Departamento vasco determina que, de acuerdo con los protocolos establecidos, la atención sanitaria en urgencias de Osakidetza (servicio vasco de salud) fue la «adecuada» y que en «ningún momento» influyó el lugar de residencia de la pequeña, en Treviño. Según el consejero vasco, se trata de un «desgraciado caso puntual fruto de una complicación muy grave y extraordinaria», pero no atribuible a «un problema de insolidaridad, discriminación o falta de colaboración entre administraciones», ha dicho en referencia al intercambio de asistencia sanitaria entre País Vasco y Castilla y León para los vecinos de zonas limítrofes.

Aunque sí se reconoce que la médica coordinadora del servicio de emergencias vasco, en conversación telefónica con la madre, «no valoró adecuadamente la información recibida». Una conversación en la que «claramente se ponía de manifiesto la gravedad» de la situación de la menor, que murió en urgencias del hospital de Vitoria apenas hora y media después. Se ha informado así de la apertura de un expediente disciplinario a la facultativa de emergencias por «falta» en el ejercicio de sus funciones profesionales, con su «correspondiente sanción». Se le reprocha una «conversación extremadamente larga», de 5 minutos y 36 segundos, tras la cual se decide que «sea la madre quien llame al médico» de guardia en Treviño, sin movilizar una ambulancia. «No actuó correctamente», han reconocido los responsables de Osakidetza, que en todo caso han reiterado que «hay recursos» suficientes y que la calidad del servicio no está en cuestión.

Con todo, la investigación concluye que el envío de una ambulancia «no hubiera alterado el curso de los acontecimientos», dado que la niña, según las explicaciones de los responsables médicos del hospital, ya presentaba un cuadro fatal con «fallo multiorgánico». La responsable de Pediatría de Urgencias del hospital ha asegurado que en la exploración «normal» efectuada a la niña «12 horas antes» en el mismo centro «no se encontró ningún dato» que les hiciera «pensar en la posibilidad de una complicación posterior». Sin fiebre ni hipotermia, con las constantes vitales y pulsos periféricos «normales», la niña fue enviada a casa con recomendaciones de vigilancia e instrucción de regresar al hospital si empeoraba.

La pequeña falleció a primera hora del lunes 17 de marzo, otra vez en urgencias del hospital vitoriano de Txagorritxu, adonde fue trasladada en coche por sus padres después de que la médica coordinadora del servicio de emergencias de Álava no estimara el envío de una ambulancia. La facultativa del 112 optó por movilizar a la médica de guardia del condado de Treviño, quien acudió minutos después de que los padres, «asustados», trasladaran por sí mismos a su hija al hospital de referencia, en Vitoria, a diez minutos en coche.