Cuarta jornada de protestas y disturbios en Burgos

Los momentos más tensos se han vivido ya entrada la noche , después de la manifestación seguida por unas 3.000 personas desde la calle Vitoria hasta la Comisaría de Policía para pedir la libertad por los detenidos a raíz de los disturbios de las jornadas previas. Este lunes, al menos otros tres jóvenes han sido detenidos.

Las voces y gritos en contra de la obra y el alcalde, Javier Lacalle, mezcladas con protestas contra «la corrupción», los recortes o las «deudas» del Ayuntamiento, se han recrudecido ya cuando la presencia de gente ha disminuido. Han sido sobre todo jóvenes los que han permanecido en la calle Vitoria que han reaccionado ante la fuerte presencia policial con el derribo de vallas de obras, lanzamiento de piedras y botellas. Y cuando parecía que la situación se calmaba, la quema de contenedores tirados en plena avenida y de la caseta de los trabajadores ha caldeado de nuevo el ambiente, obligando a intervenir a los bomberos.

La Policía ha respondido con una pequeña carga policial, ha llegado incluso a entrar en un portal para identificar a unos encapuchados y ya en los aledaños de la polémica calle han detenido al menos a tres jóvenes presuntamente por su implicación en los disturbios, mientras algunos protestantes han lanzado botellas de cristal contra el furgón policial en el que han introducido a los arrestados. Mientras, desde los balcones, los vecinos hacían sonar cacerolas de protesta e increpaban a los agentes de la Unidad de Intervención.