Presidencia calla otra vez el coste de los viajes de Paulino Rivero

El 18, la principal fuerza política de la oposición, el Partido Popular (PP), había elevado una queja a la Mesa del Parlamento regional por lo que considera un intento de «ocultar a la Cámara y a la sociedad los gastos que representan los viajes de Rivero». Un día después, la presidencia del Gabinete del Archipiélago contestó al diputado Felipe Afonso, autor de las preguntas sobre este asunto, si bien volvía a eludir el fondo de la cuestión, es decir, el montante de las facturas por los traslados.

En uno de los escritos, a los que ha tenido acceso ABC, el Gobierno que lidera el nacionalista debía informar de los «costes de los viajes del presidente en 2013». Sin embargo, en el documento solo consta «la partida presupuestaria con cargo a la cual se abonan los viajes», la 0601911G23000, «Indemnización por razón del servicio». A continuación, el Ejecutivo de las Islas expone la cantidad anotada para tal fin en las cuentas públicas en cada uno de los ejercicios: prácticamente 76.300 euros entre 2007 y 2010 y cerca de 68.700 en 2011, 2012 y el actual ejercicio. El Gabinete comunica, pues, la exacta procedencia del dinero con que se sufragan los desplazamientos, pero no cuántos euros han supuesto estos a las arcas de la autonomía en 2013, que es lo que el representante del PP lleva tiempo tratando de averiguar en su condición de parlamentario, entre cuyas funciones figura la fiscalización de la labor del Gobierno.

En una segunda respuesta, esta sobre los costes que han acarreado las comitivas de que Rivero se ha hecho acompañar, la presidencia no explicita la partida en cuestión, aunque sí sus cuantías desde 2007: casi 75.000 euros ese año; 90.000 entre 2008 y 2010; y 80.000 euros en 2011, 2012 y 2013. De nuevo se omiten los importes de las facturas, en este caso los de aquellas a las que han dado lugar los acompañantes.

Cabe recordar que los traslados al exterior del también líder de Coalición Canaria han despertado cierta polémica, ya que hay quienes juzgan excesivo tanto su número como los gastos que han conllevado. Ha alimentado esta polémica el reconocimiento de que Rivero solo vuela en clase turista si no quedan billetes de preferente , tal como avanzó este diario.