Heridos por vacaciones

En Aragón, los servicios de emergencias implicados en el rescate de accidentados en la montaña tienen ya todo preparado para encarar una nueva campaña. Saben, de antemano, que no les va a faltar trabajo.

Durante el verano del año pasado, los equipos de montaña de la Guardia Civil rescataron a un total de 323 personas en las montañas aragonesas, en su práctica totalidad en el Pirineo oscense. Da una media de aproximadamente tres rescates por día. De ellas, 197 fueron rescatadas ilesas, mientras que 118 presentaban heridas de diversa consideración y ocho fallecieron.

De las ocho personas muertas en el verano de 2013 –una más que en el verano de 2012–, una pereció mientras practicaba escalada, otra senderismo, cuatro mientras realizaban actividades en alta montaña y dos en otro tipo de prácticas deportivas o de ocio.

El senderismo, la alta montaña y el barranquismo son, por este orden, las actividades que más rescates desencadenan.

El consejero de Política Territorial e Interior del Gobierno aragonés, Antonio Suárez, insiste en que es imprescindible que quienes acuden a la montaña sean en todo momento conscientes de los riesgos y que adopten las necesarias medidas de precaución para que unos días de vacaciones no se trunquen en un accidente. A su juicio, se debe «seguir concienciando a los usuarios de la montaña, ya que la mayoría de los accidentes se siguen produciendo por sobreestimar las posibilidades, por inexperiencia, por falta de planificación de la actividad y falta de preparación física».