Coca de sardinas y espinacas

Lava muy bien las sardinas, retirándoles las escamas, las cabezas y las vísceras. Una vez limpias, sácales los lomos con la ayuda de un cuchillo muy afilado.Pica los dientes de ajo y sofríelos en una sartén con un par de cucharadas de aceite de oliva. Cuando éste comience a tomar color, añade la panceta cortada en taquitos y rehógala con el ajo hasta que se dore un poco. Entonces, incorpora las hojas de espinacas, pon a punto de sal y continúa rehogando hasta que las espinacas pierdan su rigidez y adquieran un tono oscuro (unos 5 minutos).Extiende la lámina de hojaldre (previamente descongelado a temperatura ambiente) sobre la mesa de trabajo y córtala en un rectángulo de unos 20 centímetros de largo por 10 centímetros de ancho.Coloca sobre el rectángulo de hojaldre el salteado de espinacas con panceta. Ahora dispón los lomos de sardina (con la piel hacia arriba) sobre el salteado e introduce en el horno, precalentado a 180ºC, hasta que los bordes del hojaldre queden bien dorados.Una vez fuera del horno, coloca unas cuantas lascas de parmesano sobre los lomos de sardina.

Si no gozas de demasiada maestría con los cuchillos, siempre le puedes pedir al pescadero que te saque los lomos de sardina.

Las espinacas contienen una buena y variada cantidad de vitaminas y minerales. Entre estos últimos debemos resaltar la presencia del calcio y el magnesio. Además, aportan a nuestro organismo sustancias de acción antioxidantes, que nos ayudan a prevenir enfermedades de carácter degenerativo.En cuanto a las sardinas, al igual que todo pescado azul, destacan por ser una inagotable fuente de Omega 3, un ácido graso que nos ayuda a prevenir enfermedades cardiovasculares, pues reduce los niveles de colesterol en sangre. Este pescado contiene además una buena cantidad de proteínas de gran valor biológico, así como vitaminas A, D, B2, B3 y minerales muy diversos, como el sodio, el fósforo, el magnesio, el hierro y el calcio.Sin embargo, no debemos olvidar que el hojaldre es rico en grasa y colesterol, lo que va a hacer que el contenido calórico de nuestra receta se vea incrementado.