El Gobierno vasco, «estupefacto» por que Urkullu defienda ahora la reforma fiscal

El gabinete de Patxi López ha expresado su "estupefacción" ante las declaraciones efectuadas este pasado miércoles por el líder del PNV y candidato a lehendakari, que afirmó que, en caso de llegar al Gobierno vasco, impulsaría una reforma tributaria para lograr la suficiencia económica y financiera de Euskadi. El texto denuncia asimismo que el dirigente 'jeltzale' se muestre dispuesto a liderar una revisión del sistema tributario si preside el Ejecutivo que surja de las elecciones, "después de haberse opuesto de forma contumaz" a las propuestas que en esta misma dirección viene realizando López durante los últimos meses.

El Ejecutivo autonómico ha destacado que en los dos últimos años y medio, el PNV "ha negado cualquier legitimidad al Gobierno para plantear una reforma acordada del sistema tributario, ignorando lo que establece el Estatuto y la propia Ley de Territorios Históricos". Además, ha reprochado a la formación 'jeltzale' que haya negado "la propia necesidad de proceder a esa revisión del modelo fiscal para conseguir que paguen impuestos quienes se escapan de pagar ahora, y paguen todos lo que les corresponde.

El gabinete de López ha afirmado que "en las hemerotecas y archivos han quedado las descalificaciones realizadas por el señor Urkullu y otros miembros de su partido, tildando de 'ocurrencia'" el planteamiento del lehendakari para modificar el modelo fiscal para hacerlo más justo y eficiente, y rechazando la conveniencia de luchar con más decisión y coordinación contra el fraude". En referencia a unas declaraciones del diputado general de Bizkaia, el 'jeltzale' José Luis Bilbao, ha subrayado que "para el PNV, el problema era que 'la vaca de la economía está enferma y ha dejado de dar leche suficiente'".

Desde el Gobierno autonómico se ha destacado que lo único que ha cambiado para que el PNV defienda ahora una reforma del modelo fiscal es "la expectativa de recuperar el poder perdido", dado que, a su juicio, las necesidades de los ciudadanos y el estado de la economía no han experimentado modificaciones significativas.

Para la Presidencia del Ejecutivo vasco, las palabras de Urkullu demuestran "que el paso por la oposición no ha corregido la concepción patrimonialista que el PNV tiene de las instituciones de Euskadi, ni tampoco su tendencia a supeditar los intereses generales de la ciudadanía a los suyos propios". "Que el candidato del PNV llame a recuperar el 'tiempo perdido', cuando durante más de dos años ha bloqueado una reforma esencial para dotar a Euskadi de recursos para luchar mejor contra los efectos de la crisis, es una broma que este Gobierno no puede tolerar", ha advertido.