Artur Mas: «El Gobierno debería tomar notar del clamor de la sociedad catalana»

Se desconoce aún cuánta gente participará en la marcha, pero los dirigentes catalanes ya dan por hecho que será un éxito. "Será histórica”, ha expresado el presidente del grupo parlamentario de CiU, Oriol Pujol.

En previsión del millón de personas que se estima podrían acudir a la cita, el presidente de la Generalitat, Artur Mas, ha instado al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, a "tomar nota del clamor de la sociedad catalana". Mas ha reclamado al Ejecutivo central que "preste atención", que “escuche bien” lo que se dice desde Cataluña y no menosprecie y ridiculice lo que se reclama. El presidente del Gobierno señaló ayer que España no está ni para “líos” ni para “algarabías”. No se refirió directamente al pacto fiscal que exige la Generalitat, pero se entendió como un toque de atención a Cataluña. Mas ha evitado responderle, para no entrar en controversias con el Ejecutivo central, aunque sí ha advertido al Gobierno del Estado que si no hay acuerdo sobre el pacto fiscal, la vía para libertad de Cataluña estará abierta. "Hoy no debemos pelearnos con los demás, si los demás se quieren pelear con nosotros que lo hagan, pero hoy tenemos que mantenernos fieles a nuestra voluntad de afirmación", ha afirmado.

En esta línea, Pujol ha añadido que habrá un antes y un después de esta jornada, especialmente por la manifestación convocada bajo el lema "Cataluña, nuevo Estado en Europa", que marcará el inicio del "camino hacia la libertad". Mas y Pujol han hecho estas declaraciones en el parque de la Ciudadela de Barcelona, donde ha tenido lugar el evento central que las autoridades catalanas celebran con motivo del Once de septiembre. El acto ha sido seguido por miles de personas, que se han dejado escuchar cuando han lanzado proclamas a favor de la independencia.

Mucha gente, calor y una gran marea de banderas independentistas, igual que horas antes en la ofrenda floral al monumento a Rafael Casanova, primero de los actos habituales de celebración de la Diada. En esta ocasión no habido incidentes, ya que ni el PP, ni Ciutadans han acudido a depositar su ramo, momento en el que en años anteriores recibían una buena ristra de silbidos. Ambas formaciones han excusado su ausencia con el argumento de que el Govern y los partidos soberanistas "manipulan" la Diada para convertirla en un canto al separatismo. Tampoco ha habido pitos para los representantes de la Generalitat, el resto de partidos y las principales asociaciones de Cataluña, ya que, como ya es habitual desde hace unos años, se ha alejado a los ciudadanos a 150 metros del monumento, para evitar los problemas.