La Princesa Leonor aprovecha sus vacaciones de Navidad para conocer el centro de Cruz Roja Española

Desde que volvió a España el pasado 9 de diciembre para comenzar sus vacaciones de Navidad después de finalizar el primer trimestre de su último curso en Gales, a la Princesa Leonor todavía no se la había visto en público.

Esta tarde, junto al ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, y el presidente de Cruz Roja Española, Javier Senent, conoció los servicios que ofrece Cruz Roja Española y se impregnó de los valores que esta institución defiende desde hace 158 años: humanidad, imparcialidad, neutralidad, independencia, voluntariado, unidad y universalidad. Unos principios fundamentales que la organización difunde ahora a través de un poemario que la Princesa recibió como obsequio por su visita, junto con otro ejemplar para su hermana, la Infanta Sofía.

La directora de Cruz Roja Juventud, Paula Rivarés, y del director de la Comisión de Jóvenes, Diego Vázquez, mostraron a la Princesa tres pantallas gigantes. En una de ellas, un mapa alertaba de los desastres naturales detectados por todo el mundo. En España, por ejemplo, mostraban las inundaciones de los últimos días. En otra pantalla aparecía activada la respuesta a la crisis humanitaria de Ucrania a causa de la guerra; y en el último monitor aparecía un mapa de España donde se localizaban todos los voluntarios de Cruz Roja disponibles en caso de emergencia.

Con una americana y un jersey de su madre la Reina Letizia, la Princesa Leonor prestó mucha atención a todas las explicaciones y fue haciendo preguntas. Se interesó por saber cómo se gestionan los servicios de atención telefónica, sobre todo el de ayuda psicológica 'Te Escucha', el programa de Cruz Roja enfocado a salud mental.

La segunda parte de la visita consistió en un encuentro con un grupo de once voluntarios de entre los más de 15.000 que forman Cruz Roja Juventud, que tienen entre 16 y 28 años.

Entre ellos se encontraba Juan David, un joven colombiano de 24 años que tuvo la oportunidad de contarle a la Princesa cómo Cruz Roja le ha cambiado la vida, ya que conoció la organización en un momento muy difícil para él: recién llegado a España, sin papeles y sin trabajo. La desesperación le llevó a pensar en suicidarse. La formación que recibió gracias a Cruz Roja le permitió «socializar y ver el mundo de otra forma». Los problemas de los jóvenes para encontrar empleo fue precisamente una de las cuestiones en las que la Princesa puso mayor interés durante esta visita.