La senadora que ocultó su cargo para okupar un piso de alquiler social

La dirigente madrileña debe 3.000 euros por un piso de alquiler social por el que pagaba 200 euros al mes

10/02/2017
Actualizado a las 21:06h.

El desahucio de Elvira García Díaz ha añadido más leña al incendio que amenaza con sepultar a Podemos, un partido dividido por las crisis internas . La senadora, número uno por las listas de Álava, deberá abandonar el piso de alquiler social que ... tiene en Vitoria antes del próximo seis de marzo, pues, según la administración autonómica, ha dejado de pagar los últimos quince meses. Este jueves, el partido informó de que la razón de las deudas, que alcanzan los 3.000 euros , radica en los supuestos maltratos que la implicada sufría por parte de su expareja. Sin embargo, fuentes de la fracción vasca aseguran que la dirigente madrileña no convivía con nadie. A día de hoy, de hecho, mantiene una relación sentimental con otra persona y lleva una vida normal junto a sus dos hijos.

Por otra parte, García no tenía derecho a disponer de este tipo de vivienda, pues sus ingresos anuales superan a los permitidos por el servicio que gestiona este tipo de arrendamientos en la Comunidad Autónoma vasca. Su cargo le da derecho a recibir 14 pagas de 2.813,91 euros , a los que hay que añadir 1.046,47 por ser portavoz de una comisión y 1.822,38 más para hacer frente a los gastos de vivienda por el traslado a Madrid. Por otra parte, la podemita aceptó una tarjeta que la Cámara facilita a sus representantes con 3.000 euros para taxis a pesar de que el propio partido exigió a través de una circular que no las pidieran.

A todo ello hay que añadir los 10.502,28 euros que declaró la dirigente de Podemos procedentes de la Renta de Garantía de Ingresos (RGI) , una ayuda que facilita el Servicio vasco de Empleo para las «necesidades básicas» de aquellas personas que cumplan una serie de requisitos.

A pesar de que su salario le permitía vivir con bastante holgura, García no avisó al servicio de alquileres sociales de su nueva situación. De hecho, ni siquiera quiso dar explicaciones cuando la administración llamó a su puerta para intentar encontrar una solución al problema por el tema de sus impagos. El piso en cuestión está situado en el barrio vitoriano de Salburua, y pagaba por él 200 euros mensuales .

Ególatra

Algunos de los integrantes de Podemos en el País Vasco no guardan un buen recuerdo de Elvira García, una persona que, aseguran, era muy «ególatra» y se «jactaba» de su cargo: «A lo mejor iba a comprar al supermercado y les decía a las cajeras que se había olvidado el DNI en casa, que si les valía que les enseñara su tarjeta de senadora», alegan.

Otro de los puntos que «indignan» a algunas de las personas con las que coincidió en su camino hacia el Senado es que, según afirman, García no era sincera en su currículum, en donde aseguraba ser titulada en Sociología y Derecho : «Cuando estaba aquí no tenía nada de eso. Como no se lo sacara en cuestión de meses...», destacan las mismas fuentes. La propia senadora explica en su presentación que, por «circunstancias económicas y familiares», no pudo terminar unos estudios universitarios que prometió retomar en 2015, «el año del cambio».

Por el momento, sin embargo, la formación morada no se ha pronunciado de forma oficial a las acusaciones que pesan sobre su representante. Los encargados de prensa de Podemos destacanque se trata de un caso complejo que deberán estudiar detenidamente antes de tomar cualquier decisión, por lo que no actuarán hasta que estudien el caso.