El 'simpa' que casi acaba con Alí, el dueño de un kebab apuñalado por un cliente que no quería pagar la cena
El propietario, de 32 años, fue operado de urgencia por una herida en el corazón y el pulmón
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Abdullah, compañero de Ali, atendía esta mañana el kebab Asia Estambul
La cena del cliente costaba un puñado de euros. Sobre la barra del kebab, un cartel escrito con rotulador advertía de que no se aceptaban tarjetas. Y el hombre montó en cólera. Alí y Abdullah, dos jóvenes bangladesíes que regentan el local desde hace once ... años, insistieron en que debía pagar la cuenta. El hombre gritó, tiró un plato y salió del bar; Alí lo persiguió dispuesto a reclamar su dinero. Discutieron en plena calle hasta que el cliente atacó al dueño cuchillo en mano. Alí, de 32 años, marido y padre de dos niños, tuvo que ser operado de urgencia. En estos momentos se encuentra estable.
Abdullah, de 27 años, atendía ayer el kebab Asia Estambul, un pequeño local de mesas metálicas en el distrito de Puente de Vallecas que vende durums, falafel y pollo frito. Aún no ha conseguido mantener una conversación fluida con su compañero, que sigue hospitalizado, pero sabe que está vivo. Alí sobrevivió a la puñalada en el hemitórax izquierdo que afectó a su corazón y a un pulmón. Después de ser acuchillado a tan solo unos metros del kebab, en el número 39 de la calle de Martínez de la Riva, Abdullah lo ayudó a entrar en el local. El agresor huyó y Ali se desplomó. Los servicios de emergencias recibieron la llamada cerca de la medianoche.
El herido fue atendido primero en el propio pasillo del kebab. Los sanitarios del Samur-Protección Civil tuvieron que realizar una serie de maniobras, «descomprimir el tórax del sangrado y descomprimir el saco pericárdico que rodea el corazón», según explicó un portavoz, para mantener las funciones vitales de Alí Después lo trasladaron al hospital Gregorio Marañón con «preaviso hospitalario», el protocolo en caso de que un paciente en estado muy grave necesite entrar en quirófano inmediatamente. Al cierre de esta edición, Alí se recuperaba de sus heridas.
A la fuga
La Policía Nacional investiga lo ocurrido. La hipótesis de un intento de robo está descartada: el cliente fugado entró en el kebab para pedir su cena, se negó a pagarla y empezó la violenta discusión. Según relataba ayer Abdullah, el varón rondaba la treintena de edad y mostró bruscos modales enseguida. «Nunca le habíamos visto», asegura el joven; es el primer suceso de estas características tras una década al frente del local vallecano.
Sobre la barra del Asia Estambul hay un bote de metal para guardar los cubiertos, tenedores y cuchillos para comer en las mesas del bar. «Cogió uno», sostiene Abdullah, señalando el bote y recreando con gestos la escena de la noche anterior. La versión que recabó la Policía, no obstante, apunta a que el cliente escapó del kebab y, al rato, regresó con un cuchillo e incendió la discusión. Los agentes no han encontrado el arma blanca en las inmediaciones. Tampoco al agresor, que se encuentra en busca y captura.
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