Cifuentes: «No tengo miedo a salir a la calle»

-¿Y errores?

-Más que errores, te das cuenta de que las cosas algunas veces se podrían haber hecho mejor. Grandes equivocaciones no ha habido, pero hay cosas que se podrían haber hecho mejor. De los errores, más que hablar de ellos, hay que aprender y corregirlos.

-¿Cuál es la situación de la seguridad en Madrid?

-Madrid es una ciudad y comunidad segura. Existe en algunas zonas sensación de inseguridad, que tiene que ver con pequeños delitos, faltas, la multirreincidencia, que afecta mucho al ciudadano. El Gobierno tiene un proyecto avanzado para dar un tratamiento distinto a la multirreincidencia y que la Policía pueda combatirla mejor. Cuando se detiene a un delincuente y entra por una puerta y sale por otra, provoca alarma social y frustración en la propia Policía.

-Por cierto, ¿le gusta EuroVegas?

-A mí me gusta que se cree empleo en Madrid. Creo que ese proyecto tiene mucho que ver con el turismo, no que consista específicamente en el juego. El 75% de la inversión va destinado a la hostelería y al sector del ocio. Que EuroVegas pueda venir a España y específicamente a Madrid sería una lotería, con la creación de impuestos que puede generar.

-¿No teme que se convierta en un foco de dinero negro, prostitución, drogas?

-La Policía actuará como lo hace en otra zona, con un plan específico de seguridad que deberá tener. La principal preocupación es la situación económica, y si quieren venir empresarios a invertir a Madrid, es algo positivo. Se da el mensaje de que España y Madrid son lugares seguros para venir, y eso tiene un efecto llamada para otros inversores.

-Hemos tenido un verano complicado, con el caso de la mujer rociada con ácido, el asesinato de la policía local, varios casos de ajustes de cuentas…

-La Comunidad de Madrid es muy compleja, donde viven muchos millones de personas. Este verano ha ocurrido lo de todos los veranos, ha habido una actividad delincuencial, pero no creo que más que en otros años.

-¿La gente tiene razones para estar tan cabreada?

-Habrá gente que sí y que no. La situación es muy complicada, quizá la que más en nuestra historia reciente, con un paro superior al 20%. Una situación agravada por las medidas que está tomando el Gobierno; son medidas muy dolorosas, que exigen muchísimo sacrificio, prácticamente a todas las personas. Pero me llama mucho la atención que parte de esta protesta venga de aquellas personas que apoyaban al anterior Gobierno, que son quienes nos llevaron a esta situación, la actitud beligerante de CC.OO. y UGT. Estoy haciendo referencia a lo que han dicho de que «septiembre va a ser la guerra». Esa actitud beligerante me hubiese gustado verla contra el anterior Gobierno. Los sindicatos han estado mudos los últimos ocho años, y apoyando de manera explícita una política económica que nos ha conducido al desastre. Cuando el Gobierno de Rajoy toma las únicas medidas que se pueden adoptar, ahora, todos a la calle a protestar. Tienen derecho a hacerlo, pero pido que las manifestaciones se celebren dentro de la ley, y sin altercados ni desórdenes públicos.

-¿Es el 15-M lo que más dolores de cabeza le ha dado estos meses?

-Ni muchísimo menos. Son las situaciones que tienen que ver con la agresión o la muerte de alguna persona, como la de la policía local en el cumplimiento de su trabajo, o cuando un policía nacional pierde la vida salvando a un bañista, o cuando un ciudadano es víctima de un asalto o un perturbado le da una patada a una monja que va por la calle y está al borde de la muerte, o un criminal mata a su muerte. Eso sí que me da dolor de cabeza.

-¿Ha llegado a tener miedo a salir a la calle?

-Yo no tengo miedo por esas cosas. Recibo sobre todo muestras de apoyo de la gente, y cuando son críticas, lo hacen de manera absolutamente educada. Las amenazas las recibo por las redes sociales, y no voy a seguirles el juego.