La Audiencia Nacional considera «excesivas» las medidas contra los titiriteros

La Sala de lo Penal modifica así esta obligación y acuerda que el actor de guiñol Raúl García comparezca una vez cada quince días y que Alfonso Lázaro lo haga una vez al mes . En este caso, los jueces tienen en cuenta que Lázaro padece una «grave enfermedad degenerativa que limita severamente su funcionalidad y precisa de cuidados diarios». Basta con que acuda una vez al mes al juzgado más cercano a su casa.

Para tomar esta decisión, la Audiencia Nacional argumenta que el riesgo de fuga de los dos titiriteros es «escaso». El objetivo de las medidas cautelares es asegurar que los investigados estén a disposición de la Justicia durante todo el proceso y no se sustraigan.

Los magistrados mantienen, eso sí, el resto de medidas cautelares que fijó el juez para evitar que los dos actores se fuguen y destruyan pruebas. Estas consisten en la prohibición de salir de España , la retirada del pasaporte y la obligación de que comuniquen al juzgado central de instrucción número 2 cualquier cambio de domicilio.

El juez que instruye el caso, Ismael Moreno, considera que los dos actores de guiñol enaltecieron a ETA , ya que una marioneta de la representación exhibió una pancarta que decía «Gora alka-ETA». Los abogados de los titiriteros alegan que el contexto de la obra descarta el delito: la pancarta se la colocaba un policía corrupto para incriminarle.

Para esclarecer lo que sucedió, el juez ha citado a cuatro testigos el próximo 16 de marzo para interrogarles por la representación. Los dos titiriteros fueron detenidos por la Policía y encarcelados durante cuatro días por orden del juez Ismael Moreno, a petición de la Fiscalía. El Ministerio Público pidió la libertad a los cuatro días al considerar que el riesgo de fuga y de que volvieran a delinquir había disminuido.