La líder de Ciudadanos en Valencia denuncia que Arrimadas quiere «asegurar el sillón con su lista de unidad»

Muñoz era partidaria de una única candidatura de consenso que reforzase el proceso de refundación de Ciudadanos y no de un enfrentamiento entre dos listas que ahondan la ruptura, que es lo que está ocurriendo en la actualidad con la del portavoz parlamentario, Edmundo Bal, y la de Arrimadas.

«Creo verdaderamente que es posible volver a conectar con todos ellos, y que la forma de hacerlo es introduciendo cambios profundos en nuestro partido, como piden los afiliados, cargos y candidatos liberales de toda España. Creo que eso es posible, aunque hoy sé que no lo será con esa candidatura impulsada, usurpada y tutelada por Inés Arrimadas», ha escrito Muñoz en el texto que ha compartido en redes sociales.

Noticia Relacionada

Inés Arrimadas y Edmundo Bal desvelarán sus cartas la semana que viene

Juan Casillas Bayo

La presidenta de Ciudadanos evita ahora el choque y se integrará en una lista que no liderará

En el escrito considera que la lista de Arrimadas es un pretexto de ésta para perpetuarse en el poder, a pesar de que ella no la lidere. «Esa candidatura no representa lo que durante tanto tiempo tantos afiliados trabajamos durante la Refundación Liberal», ha añadido.

A Muñoz se la presuponía más afín a Bal, pero en las últimas semanas, pese a sus intentos, no logró impulsar una candidatura de unidad en los términos en los que ella se sentía cómoda, por lo que no va a participar de un enfrentamiento que considera que aleja a los afiliados y simpatizantes.

La líder de Cs está muy disgustada con la actitud de Arrimadas. Así lo ha expresado ella: «Escribo esto con gran pesar, porque pensé que sería posible. Pero no voy a ser parte de ningún proyecto cuyo único fin es asegurar el sillón y el sueldo de ninguna persona. Lo hago, además, con la certeza de que no voy a ser parte de ninguna candidatura».

El equipo de Arrimadas le ofreció puestos con los que interpretó que buscaban solo el desgaste de Edmundo Bal. En paralelo, Bal le ofreció a la propia Arrimadas que María Muñoz fuera esa figura de consenso necesaria en calidad de portavoz política del partido. Y Arrimadas se rio y lo rechazó, según contó Bal en una entrevista a ABC.