Ione Belarra cambia la dirección de Podemos en plena Navidad y coloca a Irene Montero como secretaria política

En concreto, el Consejo Ciudadano Estatal ha aprobado, a propuesta de Belarra, el nombramiento de la exministra de Igualdad como secretaria política de Podemos, un área nueva que ratifica a Montero como número dos del partido. Además, se incorporan a la dirección la diputada Martina Velarde, que estará al frente de la secretaría de Justicia y Derechos Humanos; Conchi Abellán como secretaria de Políticas Municipales y Lucía Muñoz como secretaria de Vivienda. Por su parte, Jacinto Morano asumirá la secretaría de Economía y Políticas Públicas para un Nuevo País en sustitución de Nacho Álvarez; María Marín, la secretaría de Horizonte Verde y Animalismo; y, por último, Ismael Cortés será el secretario de Agenda 2030.

Por su parte, Serigne Mbayé continuará como responsable de la Secretaría de Antirracismo e Irene de Miguel, como secretaria de Revitalización del Medio Rural. Pedro Honrubia se ocupará de la secretaría de Análisis Electoral, mientras que Javier Sánchez Serna será el nuevo secretario de Horizonte Republicano y Profundización Democrática, y María Teresa Pérez, la secretaria de Discurso y Acción Institucional. Estos dos últimos serán, además, adjuntos a la portavocía del partido, que también ocupan Isa Serra y Pablo Fernández.

Fuentes de Podemos justifican estos cambios como una renovación de la dirección del partido de cara al nuevo ciclo político. «Las modificaciones e incorporaciones adaptan la estructura de la organización a este nuevo ciclo político, refuerzan la representación territorial en la dirección estatal y dan un nuevo impulso a valores como el ecologismo y el animalismo», afirman dichas fuentes.

No obstante, estos cambios coinciden con que la formación morada haya perdido hasta un tercio de su cúpula. Tal y como ya contó ABC, desde que Belarra fue nombrada secretaria general de Podemos, un tercio del órgano ha dimitido o dejado de participar de forma activa en las reuniones por mostrarse crítico o discrepante con la estrategia de la secretaria general y su núcleo duro.