Xunta y PP sacan pecho tras una cumbre que la oposición califica de «decepcionante»

Desde el PP, el secretario general de los populares Miguel Tellado celebró ayer que el propio presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, calificase como «prioritarias» las reivindicaciones trasladadas por Feijóo y se comprometiese a elaborar a lo largo del año un nuevo modelo de financiación para las autonomías, así como una estrategia para afrontar el problema demográfico. Dos temas «centrales» para la Comunidad y que el presidente de la Xunta avanzó que serían la punta de lanza de demandas efectuadas por la delegación gallega. « Es una muestra más de que Galicia está acertando tanto en el diagnóstico de las necesidades de sus ciudadanos como en las herramientas para atenderlas », resumió Tellado. El popular comparó el actual modelo de la Conferencia de presidentes con el del de los gobiernos socialistas y celebró que Rajoy permita que las peticiones de todas las comunidades se escuchen «en igualdad de condiciones», dejando a un lado «la receta de los privilegios de unas comunidades sobre otras del Gobierno de Zapatero».

La Xunta también sacó pecho por el papel de Feijóo en la reunión de presidentes autonómicos. Según el vicepresidente Alfonso Rueda, « si en un año el Ejecutivo estatal logra cerrar un modelo de financiación pactado con las diferentes autonomías será un enorme éxito », sobre todo si ese modelo — tal y como recogen los doce puntos acordados— tiene en cuenta el coste efectivo de la prestación de servicios atendiendo a las especificidades de cada territorio. Precisamente por esta razón, Rueda admitió no entender la postura de los presidentes de Euskadi y Cataluña, ausentes en la reunión. «Viendo el clima de consenso que hubo, creo que la ausencia de Cataluña y Euskadi fue un error que ellos mismos deberían reconsiderar», apuntó.

La visión de los grupos de la oposición dista mucho del entusiasmo manifestado por Xunta y PP. En Marea, PSdeG y BNG consideran insuficientes los acuerdos anunciados ayer y creen que no cumplieron las expectativas con las que Galicia acudía a la reunión. Desde las filas socialistas —aunque ven la reunión como un «punto de partida positivo»— lamentan la falta de medidas concretas para mejorar la prestación de servicios en la Comunidad. « No sabemos por qué saca pecho Feijóo. Nacieron comisiones de estudio y estrategias a un año vista, pero apenas ningún resultado », criticó el portavoz parlamentario del PSdeG, Xoaquín Fernández Leiceaga . El diputado socialista cree que Rajoy se mostró «poco o nada dispuesto a sacar la chequera» para paliar los desequilibrios financieros entre territorios y que afectan especialmente a Galicia. «No existe voluntad del gobierno para asumir ese déficit», lamentó Leiceaga.

Más crítica fue la portavoz parlamentaria del BNG, Ana Pontón, que calificó el encuentro como «decepcionante» . En su opinión, la cita sirvió únicamente para escenificar «la segunda parte del gran pacto PP y PSOE para hacer que nada cambie o se mueva en el Estado español». Según la portavoz nacionalista, la cumbre sirvió para consolidar el sistema de «café para todos» que, a su juicio, «significó a lo largo de estos años la pérdida de oportunidades para Galicia. También fueron «absolutamente decepcionantes» las conclusiones de la Conferencia de presidentes para el portavoz parlamentario de En Marea. Según Luís Villares, Galicia no debería conformarse con un modelo que solo «perpetúa el statu quo actual ». Además, Villares censuró que el presidente de la Xunta acudiese a Madrid sin comunicarle a los grupos de la oposición la postura que defendería Galicia en el encuentro. «No podemos saber ni siquiera si Galicia cumplió sus expectativas», lamentó.