Los institutos podrán optar por las clases semipresenciales

La entrada en las aulas empieza este jueves y viernes para los alumnos de Educación Infantil, Primaria y Edudación Especial. En estos casos los niños convivirán en grupos burbuja –a los que se oponen tanto padres, como sindicatos–, por lo que la docencia será normal. Habrá 150 aulas más que el año pasado para garantizar que se cumplen las ratios de 25 alumnos por aula .

Entre el 16 y el 17 de septiembre y también de forma escalonada se irán incorporando los alumnos del resto de niveles educativos no universitarios. Aquí podría haber novedades. En estas etapas el protocolo para prevenir los contagios en los centros educativos obliga a respetar una distancia de seguridad de 1,5 metros entre los alumno s. Pero no todas las aulas son suficientemente grandes como para que se pueda mantener. Para Bachillerato y FP Superior la Consellería ofrece ahora una docencia mixta entre virtual y presencial. La semipresencialidad, explicó la Consellería en una nota, podrán solicitarla aquellos institutos que «por el número de enseñanzas que imparten, por su matrícula, o por razones arquitectónicas, tengan dificultades para adaptarse a las medidas establecidas» en el protocolo de adaptación al contexto del Covid. En todo caso, esta opción tendrá que contar con el visto bueno de la Inspección Educativa.

Durante las últimas semanas, los equipos directivos de los centros han buscado espacios para poder cumplir las distancias de seguridad. Las clases pueden trasladarse a otros lugares del centro, como laboratorios, e incluso se baraja la posibilidad de que se impartan por las tardes .

El conselleiro también ofreció durante la reunión la posibilidad de instalar mamparas protectoras en las aulas o talleres para garantizar la seguridad y separación de los alumnos. Román Rodríguez se comprometió además a realizar las contrataciones de profesorado que sean necesarias para garantizar los desdobles de aula . Pero la Consellería sigue sin ofrecer el dato de cuántas serán necesarias. El martes el conselleiro aseguraba que aún se estaba calculando.

Además, de la reunión salió el compromiso de la Xunta de elaborar un plan de contingencia para la enseñanza virtual, en caso de brotes. Se creará un comité educativo, que se coordinará con el clínico, para tomar decisiones sobre la actividad lectiva y se aprobará un protocolo de actuación en caso de brotes. También habrá un sistema de información para que las familias puedan saber si hay contagios en un determinado centro.

Las nuevas medidas no han sido del agrado del sindicato CIG. Su secretario general Suso Bermello censuró que suponen continuismo. Consideró que la instalación de mamparas reducirá la distancia a 1 metro para no tener que contratar más profesores y vio una vuelta atrás apostar por la «semipresencialiad ».