La incógnita del 10-N: más Sánchez o un Gobierno que «cumpla» con los gallegos

Así, este fue uno de los principales mensajes del presidente en sus actos de ayer, primero en Pontevedra y después en Santiago , donde ahondó en la idea que el voto verde o naranja acaba beneficiando a la papeleta socialista. En estos mitines afirmó que «solo se producirá un cambio un cambio en el Gobierno de España si los españoles que votaron divididos en abril se unen al PP », remarcó en la Sala Capitol de Santiago. Esta es la única alternativa para que su formación política se alce el domingo con «la victoria» y vuelva a una Moncloa de la que fue desalojada tras la moción de censura a Mariano Rajoy de junio de 2018. También, para que se pueda ver en el conjunto del país a un presidente que no vea su gobernabilidad dependiente de unos pactos con partidos nacionalistas o independentistas, señaló Feijóo.

Y esa unión de todo el voto de centro-derecha en los populares, según el líder popular, permitirá que Galicia esté más cuidada por el Gobierno central. Lo basa en los incumplimientos, que a juicio de la Xunta, viene haciendo el Ejecutivo de Sánchez desde que tomó posesión, poniendo como ejemplo temas como los retrasos de la llegada del AVE a la Comunidad o situaciones como la crisis industrial que padecen las fábricas de Alcoa o la central térmica de As Pontes, que en estos momentos se encuentra parada y en peligro de un cierre que pondría en peligro el futuro de cientos de familias de la zona. Por eso, desde el PPdeG se subraya que es necesario un «Gobierno que tenga en consideración a Galicia », y también que «la respete», subrayó Feijóo.

Además, añadió el presidente, la Comunidad puede contar con que la Xunta «va a seguir haciendo lo que esté en su mano para contrarrestar la inestabilidad, los prejuicios e incumplimientos de un PSOE que no tiene a Galicia entre sus prioridades», incidió Feijóo desde la capital gallega. Ya por la mañana el popular había ahondado en el mismo tema durante un acto en la ciudad del Lérez: «Los gallegos también necesitan de un Gobierno de España que se tome en serio» a esta tierra y que por lo tanto coloque sobre la mesa «soluciones» y no «agrave los problemas».

El presidente aprovechó, como lleva haciendo insistentemente en los últimos meses, para comparar la estabilidad política de la que goza Galicia con la inestabilidad a nivel nacional , que ya ha llevado a las cuartas elecciones generales en un lapso de tan solo cuatro años. Es por ello, que en su cita en Pontevedra con un conjunto de empresarios, el titular autonómico aseguró que Galicia «va a seguir cumpliendo con los gallegos, aportando estabilidad y certezas y defendiendo sus intereses», destacó. Además quiso hacer hincapié en que su Ejecutivo es un buen ejemplo de un Gobierno que simplemente hace lo que se le pide: gobernar. «Galicia es la muestra de que hay una alternativa en el PP, siendo sinónimo de cumplimiento del deber» o, como añadió, de «responsabilidad».