Caballero compone una ejecutiva de fieles con Leiceaga como presidente

Las áreas de más peso dentro del partido las ocuparán algunos de los más estrechos colaboradores de Caballero. Es el caso del abogado coruñés Pablo Arangüena —que ostentará la función de portavoz y una de las tres vicesecretarías del PSdeG— o el diputado lucense José Antonio Quiroga, nuevo responsable de Organización . Otros cargos de la máxima confianza del economista vigués como la expresidenta del Parlamento Dolores Villarino o el portavoz del partido en Arteixo, Martín Seco, ocuparán las áreas de Política Institucional y Acción Electoral, respectivamente. Las otras dos vicesecretarías de la formación estarán representadas por la edil de Moaña Marta Freire y la también concejal en Meaño Icía García, ambas del sector que respaldó a Leiceaga en el último proceso de primarias; al igual que Iván Puentes, responsable del área de Política Municipal.

«Esta ha sido una noche muy larga. Tan larga que no ha existido», ironizaba el propio Gonzalo Caballero sobre la duración de las negociaciones, que se prolongaron durante toda la madrugada. Finalmente, la ejecutiva obtuvo el respaldo del 71% de los delegados presentes en la última jornada del XIII Congreso socialista, dos puntos por encima del respaldo que, en su día, logró la dirección de José Ramón Gómez Besteiro en la cita en la que fue nombrado secretario general.

El acuerdo incluyó además un guiño al sector oficialista en Vigo con la inclusión de la presidenta de la Diputación de Pontevedra, Carmela Silva, como una de las siete personas designadas para ocupar un puesto en el Comité Federal del partido . No obstante, el economista vigués renunció a integrar en los órganos de dirección a representantes del sector afín a su rival en las primarias, Juan Díaz Villoslada, que rechazó asistir al acto de clausura del cónclave para manifestar su rechazo a este hecho. En conversación con ABC, fuentes próximas al parlamentario coruñés recordaron que Villoslada obtuvo en el último proceso interno el respaldo del 42% de la militancia, por lo que «no comparten» la decisión de Gonzalo Caballero de dejarlos al margen.

También ha generado suspicacias dentro de la formación el escaso peso que el economista vigués ha reservado a las mujeres en la dirección del partido. Al margen de las dos vicesecretarias generales, para encontrar de nuevo a una mujer en el listado de nombres de la nueva dirección socialista hay que esperar hasta el número nueve (Dolores Villarino). La siguiente se localiza en el número 16. «Todos somos necesarios. Más descontentos o menos. Pero hay que entender que todos somos instrumentos al servicio de una causa: el cumplimiento con el interés general de una ciudadanía gallega que nos está esperando» , apuntaba el vigués en su discurso durantela jornada de clausura de la cita congresual, a la que asistió el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez.

Recién proclamado líder del PSdeG, Caballero instó a la formación a recuperar «músculo» en la calle a través del contacto con la sociedad civil y el activismo, en aras de favorecer el cambio político en las próximas citas electorales. El economista volvió a incidir en la necesidad de conformar un «ejército imparable» para liderar una coalición social de progreso a la que deben sumarse «otras opciones políticas» y también colectivos sociales. Ya en el ámbito interno, el exconcejal vigués instó a trabajar para conseguir «un modelo de partido más abierto, activo y presente en la sociedad» frente a la «demagogia» con la que —manifestó— funcionan formaciones como Podemos, a quien aludió de forma velada.

Por su parte, Pedro Sánchez felicitó a Caballero por su elección y aseguró que «hace falta» en Galicia un presidente socialista , como espera que sea el nuevo responsable del partido en la Comunidad.